(Disponible en Netflix)
A principios de año, cuando a Adam Sandler le fue incomprensiblemente negada una nominación a los Óscar por su trabajo en la excelente Diamantes en bruto – un filme que quizá le debería haber valido la estatuilla, no solo una nominación –, el prolífico comediante amenazó en broma con hacer la peor película de todos los tiempos a modo de revancha, una advertencia que el actor es más que capaz de cumplir teniendo en cuenta su filmografía en general.
Quizá ese siga siendo su plan, pero su nueva película con Netflix El Halloween de Hubie no es ese vehículo de su venganza. Sí es quizá una de las mejores propuestas recientes de la productora de Sandler, Happy Madison, un filme con inesperadas cantidades de risas y sentimiento genuinos, aunque los peores instintos de Sandler como comediante y una tendencia a la repetición excesiva le impiden llegar al grado de recomendable.
La película gira en torno a Hubie Dubois (Sandler), un hombre cuya obsesión por la Noche de Brujas y su aparente escaso intelecto lo han convertido en el hazmerreir del pueblo de Salem. Empeñado en asegurarse de que todo Salem viva un Halloween lo más seguro posible, Hubie sale a recorrer el pueblo en la noche del 31 de octubre, y descubre que muchos de sus vecinos están desapareciendo misteriosamente.
El misterio central del filme es sorprendentemente ingenioso una vez que las cosas gradualmente se van esclareciendo, jugando de forma creativa con las expectativas y referencias del género del terror, y el humor del filme oscila constantemente entre efectivo y errado.
La obra del director Steve Brill, un habitual colaborador de Sandler, brilla cuando se permite subir los índices del ridículo hasta el tope, por momentos emulando casi directamente a clásicos de la comedia “spoof” como ¿Y dónde está el piloto? o La pistola desnuda; la ridícula cantidad de proyectiles que Hubie tiene que esquivar de parte de sus vecinos en la calle o sus inexplicable destreza en la bicicleta, o su termo casero que bien podría ser una herramienta de Batman o James Bond, todo toca un tono caricaturezco que le sienta bien al filme... aunque la película parece quedarse sin ideas ingeniosas para chistes a medio camino y comienza a repetir las mismas situaciones una y otra vez.
Al igual que el índice de aciertos en el humor del filme, el personaje de Sandler y su actuación también son de una calidad, digamos, mixta.
Por un lado, Hubie no es un personaje particularmente complejo pero parece ser un avatar ingenioso para que Sandler – que co-escribió el filme – haga un comentario no muy sutil pero digno de atención sobre el odio desmedido que una persona recibe por tener una afición excéntrica pero finalmente inofensiva y sincera; uno solo tiene que reemplazar a Hubie por el propio Sandler, el Halloween por sus comedias y los hostiles vecinos de Salem por la crítica cinematográfica y lo que el filme quiere decir queda claro.
Y, francamente, no carece de razón. Sandler recibe demasiado odio por lo que al final del día no son más que comedias desechables que no serán arte de galería, pero tampoco suponen la muerte del séptimo arte. Hay cosas mejores por las que indignarse.
Pero por el otro lado, el dialecto infantilizado nasal que Sandler elige para la voz de Hubie se vuelve irritante con bastante rapidez, y no parece tener justificación alguna más allá de la afición del actor por darles a sus personajes voces “cómicas”.
Sandler no será muy respetado por la crítica, por lo general, pero evidentemente es muy respetado por sus colegas, y Hubie es el más nuevo ejemplo de una de sus comedias que ostenta un elenco de un prestigio sorprendente, con figuras como Steve Buscemi y June Squibb – con algunas inspiradas opciones de vestuario – que se destacan y se llevan a casa algunas de las risas más grandes de la película.
Es difícil llegar a un veredicto para El Halloween de Hubie que no sea neutral. Tiene demasiados aspectos positivos para declararla un fracaso - incluyendo una presentación muy atractiva que aprovecha la ambientación de Halloween para pintar imágenes de mucho colorido -, pero una cantidad casi matemáticamente exacta de cosas que anulan o contrarrestan esas virtudes y hacen que sea algo trabajoso llegar a los créditos finales.
Quizá con una duración unos 15 minutos más corta, la eliminación de ciertos personajes sobrantes e instancias repetidas de comedia, y una reconsideración por parte de Sandler sobre la voz de su personaje, Hubie habría sido una sorpresa más grata para la temporada de Halloween.
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EL HALLOWEEN DE HUBIE (Hubie Halloween)
Dirigida por Steve Brill
Escrita por Adam Sandler y Tim Herlihy
Producida por Adam Sandler, Allen Covert y Kevin Grady
Edición por Tom Costin, Brian Robinson y J.J. Titone
Dirección de fotografía por Seamus Tierney
Banda sonora compuesta por Rupert Gregson-Williams
Elenco: Adam Sandler, Julie Bowen, Kevin James, Ray Liotta, June Squibb, Steve Buscemi, Maya Rudolph, Tim Meadows, Rob Schneider, Kenan Thompson, Michael Chiklis, Karan Brar, Shaquille O’Neal, George Wallace, Noah Schnapp, Paris Berelc