Luz Gaggi se consagra a la música con su “Altar”

Luego de una infancia “muy hermosa”, donde siempre tuvo el apoyo de sus padres, de pasar a estudiar todo lo relacionado al arte y de destacarse en el reality “La Voz” de Argentina, la platense Luz Gaggi (21 años) decidió apostarlo todo en su álbum debut llamado “Altar”, donde ella se pone a sí misma en ese sitial poderoso. Sobre conocerse a través de la música, de su presente y de su deseo de visitar Paraguay habló con ABC.

Luz Gaggi construyó su propio "Altar" para entregarse a la música.gentileza
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Tras mucha introspección y búsqueda, la joven dueña de una voz poderosísima, entendió que cada uno es ese sitio importante al cual hay que venerar y cuidar. Con un equipo que supo contenerla y cuidarla, luego de la exposición que le dio estar en televisión por el programa, donde salió segunda siendo del equipo de Mau y Ricky, ella afirma que llegó a un disco que la identifica plenamente en este momento.

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“Altar” se compone de 10 canciones originales, donde combina el pop y la música urbana con la épica de los sonidos de raíz rioplatense, con reminiscencias flamencas y de hip-hop afroamericano. La poderosa voz de Luz agrega el sello distintivo en cada uno de los temas en los que los vínculos, las emociones más profundas, la ambición, la desinhibición y el empoderamiento son protagonistas.

Cabe resaltar que el material fue grabado en Los Ángeles, junto a la argentina Claudia Brant (quien escribió canciones para Camila Cabello, Soledad, Alejandro Sanz, Luis Fonsi, CNCO, Barbra Streisand, Ricky Martin, entre otros) y el estadounidense Josh Cumbee (colaborador de Janet Jackson, Take That, Madonna, Chris Brown, Adam Lambert, Kygo y muchos más).

Portada del álbum de la artista platense Luz Gaggi, que ya se encuentra disponible en todas las plataformas digitales.

Para Luz, ahora mismo, todo esto es un viaje pero también parte de un sueño del cual es muy consciente, porque desde que era pequeña, hasta ahora, siente que vivió “tres vidas diferentes, aunque me quedarán muchas más por vivir”, dijo entre risas, con mucha amabilidad, en una entrevista concedida por Zoom.

“Todo lo que viví construyó a la vida artística que estoy llevando ahora. No dejo de, obviamente, ser parte de mi cuna y mi raíz. A pesar de tener un disco, que uno piensa que te puede volar la cabeza, yo llego a casa y sigo compartiendo. Parte importante fue tener una infancia de mucho arte y de aprender un montón”, pensó sobre lo que la conecta con la Luz “de siempre”.

Un personaje que respiraba arte

Por supuesto, el camino de Luz siempre estuvo marcado por el arte, como contó. Gracias a que tenía toda la vía libre por parte de sus padres, ella tomaba el “escenario” en su casa, disfranzándose y dando shows para ellos. Esa Luz que siempre fue “bastante aparato”, necesitaba por todos lados soltar esa energía.

Gracias a que vieron algo en ella, pudo estudiar comedia musical, uniendo canto y danza. “El hecho de mostrar algo artístico siempre me fascinó”, consideró la cantante. Además, la música más ecléctica siempre estuvo presente, ya que su madre le mostraba música internacional, mucho pop, y su padre era del palo del rock argentino. “Tengo info de todos lados, más lo que fui construyendo yo de mi vida y mis propios gustos musicales. Absorbí todo eso y hoy día lo estoy planteando en mi carrera en sí”, reconoció.

Así, luego del reality, donde parte del juego es cantar canciones de otros artistas, Gaggi debía entender quién era ella artísticamente. No obstante, durante el programa, siempre se destacó por imprimir su impronta a temas famosos. Así se destacó con grandes versiones de “Billie Jean” o incluso el reggaeton “El farsante”, que transformó en una potente balada rockera. Siempre Luz destacaba por querer ser diferente.

Encontrar su ser artístico

“Fue una gran búsqueda”, indicó sobre el camino que empezó después del programa. Parte de ese transitar donde buscó quién era, tampoco estuvo exento de “entre muchas comillas fallar”. “Me ha pasado capaz de ir por caminos donde no me sentía yo. Entonces fue una gran búsqueda el escucharme, aprender, entrenar, hasta que hoy día tengo algo mucho más conciso, pero siento que va a seguir mutando a lo largo de mi vida, no sé si voy a llegar a un producto fijo en el que me voy a quedar para siempre, va a ser parte de mi crecimiento porque, espero... seguro habrán cambios a lo largo de mi vida”, planteó.

Tras firmar con el sello Sony Music, que deseaba producirle sus canciones propias, Luz entendió que debía mostrar quién era hasta ese momento. “Fue también algo que coincide con mis vivencias hasta ahora, mi corta vida, supongo que en el próximo disco habrá más cosas de las que hablar, reales, obviamente. Pero sí, todo esto es de lo que me formo hoy día, capaz mañana te saco un álbum de otra cosa que nada que ver, hablando de otras cosas, pero hoy día soy bastante “Altar”.

Luz Gaggi es una de las nuevas voces del vecino país que busca ser escuchada por el mundo.

Para reflejar ese poder que se puede escuchar en todas las canciones que conforman “Altar”, Gaggi confirmó que pudo mostrarse tan vulnerable gracias al equipo que la acompaña y la contiene. “En todo el proceso en sí me sentí tan acompañada del equipo humano que estuvo laburando para esto. Me sentí como a salvo, de poder demostrar esa vulnerabilidad, de abrirme. Entonces no sé si fui solamente yo sino todo el entorno que me permitió hacerlo de la forma que lo hice y expresarme de la forma que me expresé. Al buscar también las formas en las que lo hicimos, fue como demostrar desde el lugar más sincero y más vulnerable, al mundo, lo que se escucha hoy día”, explicó.

Pasión, fuego y tierra

En el video de “Altar” se la ve a Luz liderando un espectacular ritual de fuego. Tanto ese videoclip como los visualizers de todos los temas, fueron dirigidos por Belén Asad, desde una búsqueda original y específica, a partir de toda la simbología que rodea al concepto de lo que es un altar.

“Algo que planteamos desde un principio, cuando ya teníamos todos los temas, es que cada uno era un altar diferente, entonces viéndolo desde esa manera era como elevar todo y hacerlo como mucho más sagrado y darle honor a eso. Entonces cada tema, viéndolo como si fuera un altar, es como cada experiencia, cada aprendizaje; rendirle culto, honor a eso. Entonces fue como un trayecto muy lindo, tiene simbologías muy lindas también, como siempre apuntando a energía buena”, detalló la artista.

Así cada tema es parte de todo lo vivido hasta este punto. “Son como columnas bastante principales de mi vida en donde cada tema es sobre un hecho específico, entonces está bueno hablarlo desde la sinceridad y desde decir: ¿Esto funciona porque realmente fue así, porque se pudo expresar de esta forma’”, observó.

Todo ese concepto sumado a lo musical, generaron un conjunto de canciones bastante único, con el plus de que Gaggi transmite lo que canta de una forma descomunal gracias a su voz. Esa “mescolanza” que ella admira, no deja de sorprenderla. Además, destaca el honor de haber compartido con personas como Claudia Brant y Josh Cumbee, quienes supieron entenderle y aportar sus visiones para crear algo sin igual.

Luz afirmó que ella en todo momento tuvo presente su raíz e incluso el folclore argentino, que deseó que esté presente. “En algún momento pensé ¿cómo le explico a un chabón que vive en Estados Unidos, que nació y creció allá, cómo es mi país y cómo son los sueños de acá? Entonces fue como una mescolanza muy linda, porque cada uno rindió lo que tenía. Josh, que fue el productor, aportó lo suyo desde sus sonidos y desde donde se crió, yo aporté lo mío y Claudia lo suyo, también desde la diferencia de generaciones. Entonces fue desde el lugar de las personas que formaron parte, hicimos ese mix increíble que terminó sonando muy bien, que era algo súper arriesgado y terminó funcionando”, dijo, añadiendo luego un “creo” seguido de una sonrisa pícara.

Luz Gaggi es una combinación poderosa de honestidad y fuerza. Todo eso lo plasma con facilidad en su voz.

Estamos hechos de experiencias

Con todo esto vivido hasta ahora, Luz entiende que ha recogido experiencias y vivencias transformadoras. De todo lo atravesado, entendió que “Altar” fue un proceso que le ayudó a desarmar varios conceptos preestablecidos.

“Creo que lo principal que entendí fue el empoderamiento y pude derrumbar un montón de creencias. Eso es súper difícil, derrumbar una creencia, pero también pude ponerlas en duda. Capaz no ir a fondo con eso, sino plantearlo desde un lugar más general y decir tal vez esto no es tan así, capaz esto puede ir por acá, entonces fue también conocerme al desnudo y no ser yo como algo ya fijo, sino como que... “yo soy muy mía, yo me transformo”, diría Rosalía”, resaltó la joven argentina.

Asimismo, entendió que mutar es algo constante y que con “Altar” pudo ponerse “en un lugar más elevado para ver las cosas más desde arriba, siendo consciente que puede ser de una manera o puede ser de otra todo, digamos. Me hizo quitarme un peso gigante porque, está bueno mirarlo así, a la vez abrirme a experimentar y conocer un montón de cosas más que llevar a lo que es “Altar” hoy día”, consideró.

Finalmente, al ser consultada si siente que esto es el comienzo de todo, disparó: “Siii, olvidate ¡Estoy muy manija!”, cerró la cantante, quien espera poder llegar con sus canciones a Paraguay.

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