“Para nosotros es un logro poder presentar este material, pero nuestro anhelo es que la gente pueda encontrar otro tipo de imaginarios y sensibilidades en este tipo de propuesta”, es lo que dice la compositora, cantante y guitarrista Paty Latorre, quien integra el grupo junto Diego Peña (batería), Angel Crosa (guitarra y voz), a quienes recién se sumó Lucero Sarambí (bajo). Hoy actuarán como invitados Sol Gómez, Sofía Ferrari, Adrián Samaniego y Paola Valenzuela.
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El grupo, que se formó en 2019, nació desde “el concepto de conectar un poco más con nuestra naturaleza a través del sonido”, según aseguró Latorre, quien hizo la composición y letras de las diez canciones que dan vida al álbum, disponible en plataformas digitales, y con el que mezclan sus influencias entre el folklore local y el rock.
“Mercurio vivo” se trata de un disco que invita a escuchar todas las canciones ya que estas encierran un concepto que se desenvuelve a través de cada obra. Algunas músicas incluso están ligadas entre el final de una y el comienzo de otra.
Acerca de las decisiones ya sea sonoras o líricas, Latorre afirmó que ellos decidieron hacer lo que quisieron y como quisieron. “Somos artistas independientes y no queremos de ninguna manera fingir algo. Sentimos que aunque un tema sea largo, si tiene contenido, eventualmente llegará a dónde tenga que llegar. Sin embargo si llega algo que es deshonesto, sentiríamos muchísima pena de usar nuestro poder y oportunidad de esa forma”.
“Hablando por mí, creo que soy muy sensible y en el mundo suceden muchas cosas”, observó por otro lado Latorre, a la hora de pensar en cómo en las canciones plasma muchos de sus sentires. “Todos conectamos con ese sentimiento en la banda. Casi como que si no estuviéramos haciendo música, explotaríamos de tener tantas cosas adentro, sentimientos y pensamientos”, detalló.
Sobre el balance entre dejar ser a la creatividad y, al mismo tiempo, cumplir objetivos, Paty observó que como es “la primera vez que realmente está sucediendome algo como esto, de sacar un disco, tener un proyecto y que todos creamos en esa visión, voy aprendiendo sobre la marcha. Pero como la única forma de vivir que conozco depende de esa catarsis artística, eso no desaparece mientras haya algo que observar y retratar, supongo”, dijo.
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Equidad y unidad
A partir de su formación, el grupo ha realizado y participado de diversos conciertos por Asunción, San Bernardino, Areguá y Formosa, también coordinado eventos con la intención de “hacer crecer las redes entre artistas de la escena”.
“Todos nos enriquecemos de la diversidad en las comunidades”, resaltó la artista al hablar de si es posible construir una industria musical más diversa y equitativa. “¡Tenemos que!”, dijo al respecto, para luego añadir, entre risas, “¡qué aburrido sería un mundo monotemático ambientado solo por un tipo de persona!”.
Por ello, reafirmó que trabajar en comunidad para ellos representa “todo”. “Es imposible hacer todo esto solo. Passiflorx es una comunidad y dentro de ese universo hay galaxias enormes y bellas”, cerró.
El disco fue arreglado por la banda, que también estuvo a cargo de la producción junto a Arvid. La preproducción fue de Andrés Ortíz. La mezcla y masterización la realizó Audio Hertz. Participó en bajo Chugo Lafuente, y sumaron con su talento Lucero Sarambí, Sofi Barudi, Sofi Ferrari, Sol Gómez y Javi Arévalos.
El arte desde las ilustraciones fue de Carmela Caballero y la fotografía y el arte de tapa de Clari Lezcano. Del vestuario se encargó Aida Cáceres. Michi Fu hizo el maquillaje y en la difusión aportó Néctar.
El evento en La Chispa comenzará hoy a partir de las 16:00. Se sugiere un aporte voluntario de G. 10.000.