Hace una década, en una reunión con coordinadores de las Escuelas Comunitarias de la Red Sonidos de la Tierra, nació la idea de realizar una rifa que permita recaudar fondos para las diferentes actividades del programa, impulsado por la Fundación Tierranuestra.
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“En el esquema que desarrollamos, hasta el 50% de lo recaudado se queda en la comunidad. Se aplica de acuerdo a un proyecto de inversión de cada comunidad”, detalló Szarán. Comentó que a veces estos proyectos implican pagar el sueldo de un profesor, un viaje a un festival, etc.
Destacó además que, más allás del aspecto de recaudación que permite a las comunidades disponer de recursos, la rifa también se convirtió en “un buen ejercicio de gestión” y también fomenta el “sentido de pertenencia a lo que es una red”.
“Los equipos que administran las escuelas hacen el ejercicio de la planificación, recaudación, transparencia en la gestión, rendición de cuentas”, agregó Szarán.
Cuarenta premios
“Juntos todo suena mejor” es el lema de esta rifa, que cuenta con 40 premios entre ellos un automóvil 0 Km, G. 20 millones en efectivo, motos, electrodomésticos, mini vacaciones y muebles. El costo del cupón es de G. 10.000 y se pueden adquirir a través de www.sonidosdelatierra.com.py, con las diferentes escuelas comunitarias, o en varios puntos de venta adheridos.
Debido a la pandemia y lo que implicó el confinamiento, la organización decidió desde el año pasado modificar el calendario de la rifa. “Hicimos una estrategia de pasar la rifa a enero para que sea como un símbolo de empezar las cosas mejor”, acotó Szarán.
Logros y desafíos
Un plan de formación a distancia, en el que ya venían trabajando desde hace 5 años para llegar a las comunidades más distantes, le permitió a Sonidos de la Tierra seguir brindando clases tras el inicio de la pandemia. “Tuvimos un 65% de aprovechamiento”, comentó Szarán y afirmó que dependiendo de la calidad de la señal de internet se tenían clases en directo o se otorgaban contenidos para descargar.
Además con la campaña AngirûTech juntaron dispositivos como celulares o tablets, para distribuir a las Escuelas Comunitarias de la Red de Sonidos de la Tierra.
Szarán destacó que hoy están disponibles los contenidos para descargar en el portal meta de Paraguay Educa, mientras que en el segundo semestre del 2021 se reiniciaron las clases presenciales.
“Sonidos de la Tierra no es un conservatorio de música, es un sitio, un lugar seguro donde se pueden encontrar los jóvenes para el empleo útil de su tiempo libre y donde aprenden valores”, añadió el fundador del programa. No obstante, destacó que en estas dos décadas han surgido varios talentos, que fueron impulsados a través de un sistema de becas, y hoy son puntales en las principales orquestas del país.
Entre los proyectos de Sonidos de la Tierra para este año que se inicia están un concierto de la Orquesta H20 en la Exposición Universal de Dubái, junto a la cantante Andrea Valobra, donde estrenarán un nuevo instrumento; y la expansión de la Camerata Fem a unas diez cabeceras departamentales, ya que el 54% de los participantes del programa son mujeres.