Moncho Azuaga: “La lectura da felicidad, pero no se puede obligar a nadie a que sea feliz”

El escritor Moncho Azuaga, ganador del Premio Nacional de Literatura 2023 por su obra “Poesía siempre”, valoró ese galardón como una importante forma de apoyo y promoción de la literatura paraguaya en un contexto de pérdida del “valor político y social de la actividad cultural”. Señaló la necesidad de echar mano de las nuevas tecnologías para la difusión de la cultura.

Moncho Azuaga.GENTILEZA
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En comunicación con ABC Cardinal este miércoles, el escritor Moncho Azuaga, ganador de la nueva edición del Premio Nacional de Literatura, celebró ese galardón otorgado por el Estado como “un reconocimiento muy importante a la actividad literaria, que a veces no está tan valorada en nuestro medio”.

“Sobre todo, la poesía no se cultiva tanto, por eso que el Estado reconozca y le dé valor a esta actividad es muy importante”, agregó.

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El Congreso Nacional anunció ayer a Azuaga como ganador del Premio Nacional de Literatura por su obra Poesía siempre, seleccionada de entre 69 trabajos literarios escritos en español o en guaraní.

Azuaga describió su obra galardonada como “poesía en castellano, en guaraní, coloquial, de lo cotidiano, próxima al lector (…), que pretende dialogar sobre las cosas que nos suceden diariamente: el amor, el diálogo, el destino, la fatalidad, cosas que hacen a la vida cotidiana, pero trascienden cuando se las coloca frente a la reflexión”.

La literatura, “afición no recomendable”

Portada del libro "Poesía siempre", de Moncho Azuaga, ganador del Premio Nacional de Literatura.

El escritor reflexionó que un reconocimiento como el Premio Nacional de Literatura, que además de acarrear una importante recompensa monetaria promueve la difusión de la literatura en el país, es especialmente importante en el contexto cultural actual del país, donde que se ha reducido la circulación de libros y donde la literatura sigue siendo en cierta medida considerada “una afición no recomendable” como efecto residual de los años de represión dictatorial de la segunda mitad del siglo pasado

“La lectura da felicidad, pero no se puede obligar a nadie a que sea feliz”, dijo.

Azuaga comentó que actualmente en Paraguay se editan como máximo 500 ejemplares de un nuevo libro, cuando años atrás el número mínimo rondaba los 1.000 ejemplares.

Resaltó además la pérdida de espacios de difusión y promoción de la literatura nacional como muchos concursos literarios, academias literarias o suplementos culturales en los diarios, además de una pérdida general del “valor político y social de la actividad cultural”.

Difundir la literatura a través de la tecnología

En ese sentido, señaló la necesidad de aprovechar las nuevas tecnologías para la difusión de la literatura.

“Utilizamos diariamente las redes para difundir los trabajos literarios (…). Es una nueva forma de difusión, estamos en una época visual, es un desafío que hay que asumir”, opinó.

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