La celebración del Día de Muertos es una fiestas populares más importantes de México y con certeza la más conocida a nivel internacional, a través de películas como “Coco” y “El libro de la vida”. Y uno de los elementos principales de esta festividad es el altar de muertos que, según explicó el embajador Nungaray, cada año se dedica “a un difunto de la familia que se fue o a un personaje de la vida nacional”.
Este año optaron por dedicar el altar, montado en el Centro Paraguayo Japonés, a Tenochtitlan - Ciudad de México; ya que se cumplen 700 años de la fundación de esta ciudad por parte de los mexicas (aztecas), sobre la que luego se construyó la actual capital de México. Según detalló el embajador, también se conmemoran 500 años de la resistencia indígena como resultado de la conquista española y los 200 años de la consumación de la Independencia de México.
“Los mexicas o aztecas fueron el último grupo originario que llegó al valle de México. Ya estaba ocupado por todos los demás. Ellos crearon Tenochtitlan, un tramado de instituciones, todo un sistema especial de agricultura, todo un sistema militar, económico y social. Y tenemos a la gran pirámide que es el elemento central de esta celebración”, explicó Nungaray.
En el costado izquierdo de la pirámide se representa al periodo prehispánico y en el extremo derecho al México contemporáneo.
Reencuentro con alegría
“La celebración del Día de Muertos, en la tradición mexica, es un reencuentro con tus difuntos que vienen a visitarte esa noche. Se les reencuentra con alegría, con colores vivos, con alimentos como el tradicional pan de muertos, con las frutas que le gustaban al difunto, con los elementos principales que debe tener un altar de muertos”, agregó el diplomático.
El agua, la tierra, el aire y el fuego son los cuatro elementos que se combinan en este altar, representados a través del papel picado, los frutos de la tierra y las flores de cempasúchil y las velas.
“La celebración hoy en día es un sincretismo cultural, como resultado de la combinación de la cultura indígena mexicana y de la cultura europea española”, añadió el embajador. Señaló, por ejemplo, la presencia de una imagen de la Virgen de Guadalupe, la realización de cruces en flores de cempasúchil y de sal, como elementos cristianos que forman parte de esta tradición.
“Hay muchas comunidades indígenas en México y cada una va teniendo variantes desde el centro del país hasta el sur. También depende de los elementos de la naturaleza que tengan a la mano, pero en algunas las velas significan el alma de cada difunto y en otros nada más es para dar luz”, explicó Morán.
Otro de los elementos que no faltan en el “Altar de Muertos” es el perro, que según la tradición es el “que te ayuda a pasar el puente hacia el mictlán, hacia el mundo del más allá”.
Calaveritas de azúcar
Una de las tradiciones del Día de Muertos es la de regalar calaveritas de azúcar. El origen de esta tradición nace en el tzompantli, un muro en el que los mexicas colocaban los cráneos de los guerreros muertos en batalla, como un símbolo de honor.
“Para la cultura mexicana se regalan calaveritas con tu nombre escrito y no es de que le desees la muerte a alguien. Es un símbolo de amistad, para recordarte que sigues vivo y de lo único que tenemos certeza es la muerte”, añadió Morán.
Explicó que esta tradición se impulsa en los colegios, al igual que las calaveritas literarias. Un tipo de relatos breves, en verso, que se caracterizan por su sentido del humor y su picardía.
Catrinas y alebrijes
Otro de los elementos característicos de esta celebración mexicana es la Catrina, un personaje surgido a partir de un dibujo realizado por José Guadalupe Posada. “Nace como una forma de protesta contra los ricos que existían en México en la época del porfiriato (finales de siglo XIX).
“Catrina o catrino se le dice en México a la gente rica como una expresión, no peyorativa, pero especial”, detalló Morán. Agregó que en dicha época, a través de la influencia francesa, la gente de la clase alta comenzó a utilizar grandes vestidos, sombreros de copa, etc.
“Posada empieza a dibujar y hace solamente la cara con el cráneo. Posteriormente, Diego Rivera es quien le pone el vestido del estilo francés. Ahí ya nace o se populariza la catrina, como una crítica a esa sociedad, a las diferencias sociales”, añadió la agregada cultural.
En tanto, los alebrijes son una interpretación de animales mezclados con otros y alados, generalmente realizados en cartón.
Música, danza y gastronomía
A partir de las 19:00, el público podrá hoy disfrutar de la celebración del Día de Muertos en el CPJ, con acceso libre y gratuito. La actividad contará con música en vivo a cargo de Mirta Noemí Talavera y su grupo, un espectáculo de danzas tradicionales mexicanas a cargo del Ballet Municipal de Fernando de la Mora, habrá puestos de comida tradicional y se entregará como obsequio el pan de muertos.
El “Altar de Muertos” permanecerá abierto al público el resto de la semana. Mañana, de 11:00 a 13:00 habrá visitas guiadas cada media hora. También de 15:00 a 17:00, el miércoles y jueves.