El guitarrista y compositor Juan Vera Esquivel plasmó en este disco trece obras inéditas, en un formato que incluye guitarra, bajo eléctrico y percusiones. Contó con invitados como Juanca Lucas en charango, y Leandro Veragua y Dani Pavetti en percusiones.
Este nuevo álbum explora una sonoridad desde la perspectiva del compositor, utilizando células rítmicas de la música folclórica latinoamericana con ritmos en seis octavos y la sonoridad particular de la ejecución de la guitarra en la técnica del transportado, estilo autóctono de interpretación del instrumento desarrollado en nuestro país y heredada a Juan Vera Esquivel por su maestro Efrén Echeverría.
“Es muy bueno para todos que la música no pare”, expresó el artista a ABC, al respecto de lanzar un disco dentro de este contexto. Afirmó que si bien realizar un álbum y presentarlo son cosas “que se tornan más complicadas de lo que suelen ser normalmente, que se retome de a poco nos hace bien en lo económico, y que la música siga fluyendo nos hace mejor aún en lo emocional, porque la música es un soporte vital para la humanidad, es el mejor remedio para todo mal”.
En ese sentido, Juan confirmó que este álbum es el remedio para su alma. “Espero que eso que siento yo al eschucharlo también se pueda transmitir a todas las personas que lo escuchen”, indicó.
Justamente vivencias y experiencias de vida son las cosas que Juan plasmó en este disco. “Siempre las experiencias te van dejando enseñanzas. Algunas se plasman en canciones como los mejores recuerdos que guardamos para siempre. El amor hacia mis hijas es lo que más inquieta mi espíritu musical”, señaló.
El artista valoró como algo “fundamental” que siga habiendo nuevas creaciones para guitarra “porque somos una nación de grandes guitarristas, y cada vez se agranda la familia guitarrística en nuestra región”. Asimismo, destacó que “hay festivales internacionales que convocan anualmente a grandes exponentes del instrumento, y creo que a nivel internacional Paraguay ocupa un lugar muy privilegiado gracias al gran trabajo de Agustín Barrios, Cayo Sila Godoy, Felipe Sosa, Berta Rojas, Luz María Bobadilla, entre otros”.
“Nosotros, los exponentes nuevos de esta generación, debemos estar orgullosos y asumir como responsabilidad el legado guitarrístico que tenemos. Hay tantos compositores geniales en nuestro país como mis queridos colegas Alejo Jiménez, Pedro Martínez, Juan Duarte, entre otros, que hacen un trabajo importante por el instrumento, y espero que mi trabajo también logre aportar mucho a nuestra cultura”, expuso.
Acerca de seguir con el legado de su maestro Kamba’i, afirmó que “es un peso muy grande cargado de responsabilidades, metas logradas y por cumplir”.
“Lograr una visibilidad de la técnica del transportado a nivel internacional es un objetivo que está en proceso, y espero que cuando esta pandemia termine pueda seguir viajando con mi guitarra para seguir mostrando nuestra música y esta peculiar forma de ejecutar la guitarra. A nivel nacional uno de mis preciados sueños es lograr academizar el legado del maestro Efrén Echeverría y para ello el trabajo también es arduo. Eso ya lo inicié publicando un Método de Guitarra sobre dicha técnica y hay otros trabajos interesantes en procesos”, contó.
Las entradas para el concierto cuestan G. 20.000 o G. 50.000 (con el disco). Se tomarán en cuenta las medidas sanitarias.