Escenificando a la migración

Con el teatro documental “Ahata Aju”, la directora Fátima Fernández Centurión busca indagar en las historias vinculadas a la migración. Tras haber iniciado este proyecto en Buenos Aires, ahora llevará al escenario a Carolina Ronquillo y Flori Rodríguez, una chef peruana y una educadora española, que residen en Asunción.

“No suelo estar en primer plano, hasta ahora”, expresó Flori con relación a su debut actoral.gentileza
“Estoy nerviosa, pero son como unos nervios bonitos”, subrayó Carolina en relación con el estreno.gentileza
Carolina Ronquillo, Fátima Fernández Centurión y Flori Rodríguez brindaron detalles de la obra.
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“Yo decido empezar esta obra con tres paraguayos migrantes”, detalló Fátima acerca del primer capítulo de este proyecto que se inició en Argentina, en el año 2014, cuando ella también estaba experimentando la migración. La obra llegó a escena en el 2016 y fue parte de su proyecto de graduación en la Licenciatura en Dirección Escénica de la Universidad Nacional de las Artes (UNA).

A su regreso, decidió seguir con este proyecto, tratando de abarcar parte de la migración extranjera en Paraguay y sobre todo la experiencia de las mujeres. “Mi idea es ir trabajando también con distintas comunidades, ver qué se genera, ver qué pasa”, detalló.

“Nunca es igual una mujer que migra sola a una mujer que migra en familia, en pareja. Es distinto. También ellas tienen como una edad media, donde se presentan distintas situaciones”, añadió la directora, señalando que ya se estaba preparando para estrenar la obra el 27 de marzo, con la historia de tres mujeres.

El covid-19 cambió los planes, pero afirmó que la pandemia “abrió otras posibilidades”. Una de ellas es que al llevar la obra al streaming, las familias y amigos de Carolina y Flori van a poder acompañar la función que se realizará en el Galpón de Nhi-Mu.

“Para nosotras como personas migrantes que están lejos y a veces te da la impresión de que te pierdes de todo lo que sucede allá, que por primera vez te pase algo a ti y los otros puedan participar aunque sea de la distancia es bien bonito”, expresó Carolina, comentando que sus padres y la gente del pueblo de su familia materna ya están expectantes por lo que será su debut en el escenario.

Comentó que su llegada a Paraguay fue como mochilera, en su ruta hacia Brasil. “No llegué jamás”, comentó, relatando que fue acogida por una familia peruana y se quedó por casi seis meses.

Retornó a Perú, pero luego el amor y las ganas de “aprovechar la coyuntura y el hecho de la escena gastronómica recién estaba empezando”, la trajeron de vuelta a Asunción hace unos 7 años.

“En estos últimos meses me pasaron un montón de cosas que jamás pensé que iba a hacer. Nunca pensé que iba a estar en un programa de televisión (MasterChef Paraguay) o protagonizar una obra de teatro”, expresó, mencionando que para ella la experiencia con la obra ha sido “terapeútica”.

“Con todo esto que está pasando y con todo lo que me ha pasado a mí en los últimos años, creo que sin la obra yo no sería la persona que soy ahora. Me ha hecho pasar por muchos procesos de interiorización, y además, en el círculo en el que coincidentemente nos ha tocado trabajar es un círculo de mujeres, que para mí ha sido como un abrazo, superreconfortante”, añadió.

Flori, por su parte, comentó que llegó a Paraguay para un intercambio universitario hace casi una década. “Desde entonces me enganché con este lugar”, acotó.

Si bien el escenario no es ajeno a su experiencia en la música, sí la actuación la pone ante un nuevo desafío. “Esto nos ha permitido poder desempolvar ciertas emociones que dejamos un poquito de lado porque cuando migras, tienes que centrarte en adaptarte al lugar y los ritmos, la dinámica de lo que te envuelve hace que tengas que adaptarte de la manera más felizmente posible”, añadió.

En la obra, según comentó Fátima, ambas estarán representando a personajes, pero basados en sus propios relatos. La puesta incluirá instantes musicales, interacción con audiovisual y “momentos más clownescos”, mientras que la pandemia se abordará de forma más poética, añadió la directora.

La única oportunidad para ver la obra en internet será el domingo 30 a las 20:00, a través de Passline Paraguay, con tickets a G. 45.000.

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