La tradición culinaria de la sopa paraguaya

La culinaria paraguaya tiene su particularidad con su sopa, pues es sólida y no una líquida como se conoce generalmente. En Semana Santa, la sopa paraguaya no falta en la mesa como entrada o el acompañamiento ideal de cualquier menú.

En el campo, la sopa paraguaya es cocida en el tatakua, lo que le permite un sabor diferencial.
La sopa paraguaya contiene ingredientes fáciles de conseguir al igual que su preparación.
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Su preparación es fácil, con ingredientes que se consiguen en cualquier supermercado. Tampoco tiene un precio costoso. Basta animarse a prepararla y así degustar una receta centenaria.

Los ingredientes

La lista incluye 300 gramos de harina de maíz, 500 c.c. de leche, tres cebollas grandes, 300 gramos de queso fresco, 100 gramos de queso rallado, cuatro huevos, pimienta negra molida, sal y aceite.

Paso a paso

Pelar y cortar la cebolla bien fina y rehogarla con un poco de aceite en una sartén hasta que se transparente. Sal y pimienta al gusto. Batir los huevos en un recipiente con ayuda de un batidor de alambre o una batidora eléctrica hasta que se tornen espumosos. Colocar la harina de maíz en un recipiente amplio y añadir la cebolla, la leche, la sal y la pimienta al gusto. Mezclar nuevamente y verter los huevos y el queso fresco cortado en cubos pequeños. Tratar de que no queden grumos.

Integrar los huevos con movimientos envolventes con ayuda de una espátula y vertir en una bandeja apta para horno engrasada con aceite. Espolvorear con queso rallado y llevar a horno medio durante 30 minutos o más hasta que esté dorada la superficie y hasta que al pinchar la sopa paraguaya con un palillo este salga limpio. Dejar enfriar y cortar en cuadrados.

Generalmente la sopa paraguaya se sirve como entrada en las reuniones sociales, pero también es un perfecto acompañante. Esta receta típica de nuestra gastronomía es rica en calorías y proteínas.

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