El primer recapturado fue el brasileño Eduardo Alves da Cunha, quien usaba otra identidad: Luis Alves da Cruz. Este fue sorprendido por agentes del Departamento de Operaciones de Frontera (DOF), del Brasil, en la ciudad de Ponta Porã de esa nación.
El brasileño, sin embargo, ya no será devuelto al Paraguay para que siga cumpliendo su sentencia por narcotráfico, debido a que la ley brasileña prohíbe extraditar a sus connacionales.
En todo caso, lo que la Fiscalía de Paraguay debe hacer es pedir que el convicto siga cumpliendo su pena en una cárcel del país vecino.
El segundo reo atrapado fue el paraguayo Sabio Darío González Figueredo, quien estaba escondido en una casa cercana a la cárcel de la cual había huido el domingo último.
Sabio, quien está procesado por asalto, alegó que despertó el domingo a las 05:00 y notó que casi nadie estaba en su pabellón de la planta alta, por lo que al salir de su celda para revisar lo que pasaba se percató de la fuga masiva y se adhirió a ella.
Así, quedan en teoría 74 reos evadidos, ya que la cifra oficial señala que 76 reclusos escaparon a través del túnel detectado en el pabellón de la banda PCC. Sin embargo, de esos 74 que siguen fugitivos hay que descontar otra vez dos nombres, Enrique Duarte Ramírez y Alberto Ariel Cristaldo Valiente, quienes nunca estuvieron presos, pero cuyos datos difundió por error el Ministerio de Justicia.
Por otro lado, las fiscalas Reinalda Palacio, Fabiola Molas e Irene Álvarez imputaron ayer a 32 funcionarios penitenciarios de Pedro Juan Caballero, con el destituido director Christian González a la cabeza. Los hechos punibles que se les atribuyen son liberación de presos, frustración de la ejecución penal y asociación criminal en el inciso por prestar servicios a una asociación criminal.
Patrón apresado
En otro caso de interés para la frontera, fue capturado ayer en suelo brasileño el paraguayo Ederson Salinas Benítez, alias Ryguasu, quien quería quedar en vez del brasileño Minotauro como patrón narco de la frontera.