Sonia Cáceres, presidenta de la Asociación de Empresas Paraguayas de Eventos (Aseppe) informó que hace tres semanas entregaron un protocolo que establece una serie de restricciones, similar al aplicado en el rubro gastronómico, con el objetivo de facilitar la labor de las autoridades sanitarias y a ellos, permitirles trabajar formalmente.
“Se trata de blanquear la situación, porque la gente está desarrollando eventos pero no existen garantías ni mayor control del cumplimiento de las normas, queremos encargarnos de garantizar la trazabilidad”, dijo y añadió que para ello les urge un calendario que les permita planificar sus actividades y eventuales ingresos. Hoy se estima que habría una extensión de la fase 3 de la cuarentena, situación que la calificó de mortal.
La propuesta la presentaron al Centro Operativo de Emergencia (COE) y hasta el momento no hubo respuestas. Los empresarios sugieren designar a un profesional de eventos, quien será responsable de la recopilación de datos de forma sistemática y de activar la alerta en caso de que exista un caso sospechoso.
“Hoy el Ministerio de Salud hace un trabajo enorme para recabar información, identificar los nexos y detectar eventuales contagiados, nosotros podemos encargarnos de eso e incluso brindar una respuesta más rápida”, y que su aplicación puede darse de manera inmediata, explicó.
Recordó que los trabajadores agrupados en fase 4 están sin facturar hace cuatro meses y que el Gobierno demuestra que no les tienen en cuenta al no brindarles flexibilidades. “Solo tres meses tuvo de duración la emergencia sanitaria para la suspensión de pagos de servicios básicos, alquileres y cuentas bancarias, tiempo que nosotros no registramos ingresos y ahora nos reclaman los pagos como si nada. Nos lanzaron a los leones”, afirmó Cáceres. El calendario propuesto está sujeto a cambios dijo y destacó que los empresarios desean que los avances sanitarios vayan de la mano con la economía, para todos los sectores.