En comunicación con ABC Cardinal este martes, Mario Balmelli, representante de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), comentó sobre la suspensión por parte de una importante cadena francesa de la comercialización de carne proveniente de países del Mercado Común del Sur (Mercosur), en el marco de las protestas de productores y el rechazo del Gobierno de ese país al acuerdo de libre comercio entre el bloque sudamericano y la Unión Europea.
La semana pasada, la cadena multinacional francesa de supermercados Carrefour anunció que dejaría de comprar carne importada a la Unión Europea desde el Mercosur para sus tiendas en Francia, alegando que la carne sudamericana no es producida con las mismas “normas y exigencias” que los productos franceses, por lo que supone un “riesgo”.
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La medida se produce en un contexto de crecientes manifestaciones de productores franceses que rechazan el acuerdo Mercosur-UE, una postura de la que el propio Gobierno francés se ha hecho eco, argumentando que el convenio no impone a la carne sudamericana los mismos estándares de calidad y sostenibilidad que rigen para los productores europeos, lo que desde su punto de vista propiciaría que la carne del Mercosur compita de forma “desleal” con los productos locales en la Unión Europea.
La ARP y otros gremios de productores cárnicos del Mercosur se manifestaron en rechazo de la decisión de Carrefour, y algunas empresas brasileñas anunciaron que dejarán de vender su carne a las sucursales de esa cadena en Brasil, en protesta.
“Ideologías” utilizadas como “barreras arancelarias”
Balmelli afirmó que la afirmación de Carrefour de que la carne del Mercosur no se produce con los mismos estándares de calidad que la carne francesa es “absolutamente falsa”.
Opinó que las medidas de protección medioambiental que busca aplicar la Unión Europea a productos sudamericanos no se basan en “conocimientos científicos”, sino en “presunciones” e “ideologías” que “son utilizadas como barreras arancelarias”.
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“En estos países, una manera de frenar la introducción de productos de nuestros países son los altos aranceles”, dijo. “Cuando a pesar de eso fuimos capaces de colocar (en el mercado europeo) una carne absolutamente sana e inocua a precios competitivos surgen estas ideas que buscan con artificios frenar el ingreso de nuestras carnes”.
Agregó que “casi todas las medidas que ellos aducen en sostenibilidad, Paraguay y el Mercosur las cumplen”.
La importancia del mercado europeo para Paraguay
Balmelli explicó que, en términos de volumen e ingresos económicos, el mercado europeo no tiene un “impacto significativo” en las exportaciones paraguayas, ya que solo un dos por ciento de la carne que produce el país va a la Unión Europea.
Sin embargo, enfatizó que tener presencia en el mercado europeo sí es importante para el sector ganadero paraguayo porque muchos otros mercados toman a la Unión Europea como referencia y tener habilitación en Europa supone “una suerte de visa” que puede abrir muchos otros mercados a los productos paraguayos.
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“Nosotros vamos a seguir buscando estar habilitados (en Europa), pero no estamos dispuestos a adoptar normas que nos quieran imponer, por delante de todo está el desarrollo de Paraguay”, dijo el representante de la ARP.