El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) dio a conocer ayer los resultados financieros de la Caja Fiscal al cierre del primer cuatrimestre del año. La entidad previsional del sector público cuenta con 226.769 aportantes (funcionarios activos), 64.234 jubilados y 11.770 herederos o pensionados que reciben los beneficios.
Los datos indican que enero a abril los ingresos alcanzaron más de G. 1 billón (US$ 137,2 millones), pero los gastos efectuados superaron G. 1,7 billones (US$ 235,8 millones).
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La diferencia negativa entre ingresos y gastos representa G. 726.131 millones (US$ 98,6 millones), que equivale a 42%.
Ingresos e inversiones en la Caja Fiscal
La Caja Fiscal percibe en concepto de ingresos el aporte del 16% de los funcionarios activos, también por multas, saldo no devengado, aporte ley 6085, 20% primer sueldo, diferencia salarial, 4% de licencia.
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En tanto, tiene invertido en el sistema financiero local en bonos de la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD) y certificado de depósito de ahorro (CDA) un total de G. 3 billones (US$ 407 millones), por lo que recibirá este año en concepto de interés G. 218.035 millones (US$ 29,6 millones).
Financiamiento del déficit de la Caja
El déficit se financia en gran parte con los recursos del Tesoro, que proviene de la recaudación de impuestos que paga la ciudadanía, tales como IVA, renta, selectivo al consumo y otros.
La entidad previsional del sector público está conformada por seis sectores y solo uno registra superávit, los demás acumulan déficit desde hace tiempo.
El sector de empleados públicos cerró abril con superávit del 20%, mientras que los demás: magistrados judiciales, docentes universitarios, militares, policías y maestros registran saldo rojo del 30%, 19%, 75%, 66% y 48%, respectivamente.
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Los analistas económicos locales y los organismo financieros internacionales, incluso las propias autoridades del MEF, coinciden en que la Caja Fiscal necesita urgentes reformas porque de seguir así en poco tiempo utilizará todas sus reservas y colapsará.
La última misión técnica del Fondo Monetario Internacional (FMI) que estuvo en el país entre el 29 de abril y el 8 de mayo, en su informe sobre los resultados de la evaluación de la economía del país indica que el gobierno está trabajando en el diseño de una reforma paramétrica de la referida Caja de Jubilaciones y Pensiones.
Medidas de contingencia
El organismo no dio detalles respecto al diseño de las reformas paramétricas a ser planteada, pero de acuerdo con los antecedentes en 2022 el entonces Ministerio de Hacienda elevó a consideración de la Cámara de Senadores unas medidas de denominadas de “contingencia” para reducir el déficit.
La propuesta incluía un nuevo mecanismo de actualización de haberes, aumentar para los sectores deficitarios la tasa de aporte del 16% al 20%, así como establecer 55 años de edad y 25 años de aporte para la jubilación ordinaria de los docentes.
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Hacienda, hoy Ministerio de Economía y Finanzas, argumentó su propuesta en la necesidad urgente de realizar ajustes a los parámetros actuales, sobre todo en aquellos sectores que se desprendieron de manera grave de la estabilidad financiera, arrastrando a los demás sectores.
Senado no trató la propuesta
El planteamiento no fue considerado por el Senado, atendiendo que los sectores afectados rechazaron la intención de la cartera.
Actualmente, el único proyectos de ley que está a consideración de las comisiones de la Cámara Alta, es el que crea una comisión nacional para analizar la reforma del sistema de jubilaciones de todo el sector público.