El grupo Raizen Paraguay (Shell y Barcos y Rodados) informó hoy a sus operadores que suspendió la operación con la tarjeta flota de Petropar, lo que se debería a una deuda de unos G. 20.000 millones de la estatal con el citado emblema. En este sentido, con la venta de combustible a precio artificial, la petrolera pública no estaría pudiendo cumplir con las proveedoras de carburantes.
En este sentido, Petropar tiene suscrito contratos con varias distribuidoras para la provisión de combustibles al sector público bajo la modalidad de la “tarjeta Petropar”, en el cual se estipulan las condiciones comerciales entre las partes.
Como Petropar no tiene una cobertura territorial recurre a estaciones de otros emblemas para que sus clientes (principalmente vinculados a la función pública) puedan cargar el carburante que necesiten en estos servicentros de privados y la estatal debe reponer el combustible a sus “aliados”.
“Informamos que a partir de las 00.00 de la fecha 13 de noviembre del corriente, quedan suspendidas las operaciones de venta con la Tarjeta Flota Petropar en la totalidad de las estaciones de servicio de nuestra red, tanto de la bandera Shell como la de Barcos y Rodados, en todo el país”, informó a sus operadores el grupo Raizen.
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Alegan incumplimiento de Petropar
Asimismo, aclaró que esto significa que quedan suspendidos los reintegros provenientes de estas transacciones, a partir de la fecha y hora indicada. “Esta situación se da lamentablemente por el incumplimiento por parte de la Distribuidora Petropar de la contraprestación establecida en el contrato desde hace varios meses, a pesar de los continuos reclamos efectuados”, resalta el escrito.
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Desde Petropar, solo se limitaron a informar ante la consulta de este diario, a través de su departamento de Comunicaciones, que “a fin de verificar que ambas partes resulten beneficiadas del acuerdo, Petropar se encuentra cotejando los términos comerciales, y el buen cumplimiento del mismo” y que “una vez analizado y conciliado los puntos pertinentes se estará formalizando la operativa”.
Pero nada aclaró sobre la millonaria deuda que acumula en combustibles a las estaciones habilitadas para expedir carburantes con la tarjeta de Petropar.