El proyecto de presupuesto 2024 prevé destinar poco más de G. 23,7 billones (US$ 3.228 millones) de los ingresos tributarios para cubrir salarios de funcionarios de la administración central y de entidades descentralizadas que reciben fondos del Tesoro.
La cifra representa el 69% del total proyectado recaudar en impuestos, que asciende a G. 34,4 billones (US$ 4.679 millones) e implica un aumento del 8,5% con respecto a la estimación de cierre de 2023 (presión tributaria 10% del PIB).
La mayor recaudación se estima lograr sin aumentar tasas ni crear nuevos impuestos, una decisión ya adoptada por el gobierno para los próximos 5 años.
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Se espera que a través de la nueva Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT) ingresen US$ 400 millones más, reduciendo la evasión y el contrabando, aunque este monto no fue incluido en el plan presentado.
El informe menciona que de cada G. 100 que ingresan al fisco en concepto de pago de impuestos, G. 69 se utilizarán para cumplir con las remuneraciones de los funcionarios públicos.
Según la cartera económica, el capital humano del sector salud, educación y seguridad son las absorben en mayor medida dichos gastos.
Distribución de los recursos en salarios
Los datos mencionan que el sector educación se lleva el 32% del total de ingresos, salud el 23%, policías y militares 21%, el Poder Legislativo 2%, el Poder Judicial 9%, otros organismos del Estado de la administración central 4% y las entidades descentralizadas 9%.
Las autoridades del Ministerio de Economía en la presentación del PGN 2024 al Congreso, señalaron que el 87% de los ingresos genuinos se destinan a gastos rígidos (salarios, jubilaciones y pensiones, deuda y otros) y solo el 13% restante se distribuye a otros gastos, que incluye la inversión pública.
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El informe explica que el mantenimiento de la estructura del Estado, el sostenimiento de los servicios de protección a la población vulnerable, la educación y el cumplimiento de las obligaciones como deuda y jubilaciones forman parte de los gastos considerados rígidos.
Añade que estos gastos que a su vez, son corrientes, cumplen una función estratégica en el proceso de entrega de bienes y prestación de servicios públicos. En ese sentido, menciona que consecuentemente, el peso de los salarios respecto a la recaudación es de 60%, menor en 15% al presupuesto 2023.