Un crecimiento del 6,1% de la actividad económica es un buen número, muy auspicioso, y está en línea con lo esperado, apuntó el economista y ex ministro de Hacienda César Barreto. Este impulso, según detalló, se debe principalmente al buen desempeño del sector agrícola, con un buen rendimiento en la producción de soja, que viene de un mal año en el 2022 a causa de la sequía.
De hecho para Fundación Desarrollo en Democracia (Dende), el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) estaría por encima de la estimación oficial ( 4,5%), en alrededor del 6% en este contexto.
Según datos de comercio exterior del Banco Central del Paraguay (BC) y que confirman esta buena campaña sojera, la exportación de soja ya ingresó US$ 1.380 millones al cuarto mes del año, que representa un repunte de 130% con respecto al mismo periodo del año pasado.
Sin embargo, pese a los buenos resultados de la actividad económica en el primer trimestre del año, esto no se está reflejando en la dinámica de empleos. Es que justamente los sectores más activos en la generación de mano de obra, son los que se ven impactados por diferentes escenarios.
Lea más: Actividad económica ya creció 6,1% a marzo y consolidad recuperación
Riesgos para el crecimiento
Justamente Barreto indicó que persisten algunos riesgos para estas proyecciones. Por un lado señaló que ha sorprendido el bajo rendimiento de las construcciones. Si bien se esperaba una desaceleración de las obras públicas en el marco del cumplimiento de la convergencia fiscal (que obliga al Gobierno a reducir sus gastos e inversiones para volver el déficit fiscal al 1,5% del PIB), la actividad está muy afectada y su rendimiento por debajo de las proyecciones iniciales.
Cabe mencionar que el sector de la construcción viene afectada por dos situaciones, la primera que tiene que ver con la reducción de inversión por parte del Gobierno para obras públicas, y por otro lado por los impagos acumulados del Estado para las constructoras, que se encuentran limitadas de recursos incluso para desarrollo de proyectos privados.
Por esa razón, es que el BCP redujo su estimación desde un crecimiento del 0,5% previsto inicialmente para el cierre del año, a una retracción del 2,6%.
Lea más: Repuntar construcciones será uno de los grandes desafíos para el gobierno
Empleos ya se recienten
Barreto lamentó esta situación, ya que el sector de construcciones es además un generador activo de empleos.
De hecho, datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) confirman que en tres meses, se perdieron más de 23.000 puestos de trabajo en construcciones y de agravarse la situación este número de desocupados puede incrementar. Al primer trimestre del año, el sector de construcción empelaba a unos 257.000 personas.
Lea más: Desempleo sube a 6,5% en el primer trimestre y afecta a 243.000 personas
Contrabando latente
Otro de los riesgos enumerados por Barreto es el contrabando de productos, principalmente desde la Argentina, que sigue impactando negativamente en los comercios formales y las industrias nacionales. El profesional indicó que lastimosamente no hay cómo detener este flagelo, porque la crisis argentina está latente con un peso cada vez más desvalorizado, con un escenario político de mucha incertidumbre, lo que hace prácticamente imposible para nuestro mercado competir con los productos argentinos.
En el informe del INE se puede apreciar justamente que el sector industrial perdió más de 53.000 puestos laborales en los últimos tres meses. Al cierre del primer trimestre del año, las industrias a unas 319.000 personas.
Cifras de Imaep y desempleo
De acuerdo con datos oficiales del BCP, el Índice Mensual de la Actividad Económica (Imaep) presentó una variación del 8,2% en el mes de marzo, con lo cual acumuló en el primer trimestre del año una expansión del 6,1%.
Por otra parte, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) reveló que en el primer trimestre el desempleo aumentó a 6,5% desde 5,7% que alcanzó en el trimestre anterior, afectando a unos 243.000 compatriotas.