El fiscal Francisco Cabrera Sanabria, de la Unidad Especializada en Delitos Económicos y Anticorrupción (UDEA), está investigando el cuestionado contrato de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac) con la empresa Estructura Ingeniería SA (EISA), de Alberto Palumbo, para las obras del espigón norte del aeropuerto Silvio Pettirossi.
La carpeta fiscal se abrió en agosto del año pasado, luego de una denuncia penal que presentó la Dinac, tras la rescisión del contrato con dicha empresa, lo que se dio por serios incumplimientos detectados en la ejecución de la obra y por los excesivos retrasos.
Por esta razón las “mejoras” quedaron inconclusas y siguen sin habilitarse a los usuarios de la colapsada terminal aérea. Es más, la zona ampliada se encuentra en deplorables condiciones, según se pudo corroborar en un recorrido de ABC por el lugar.
La obra se adjudicó hace más de cuatro años, durante la administración de Edgar Melgarejo, declarado “significativamente corrupto” por Estados Unidos y debía culminar a finales de 2019, según el cronograma original.
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Eventual estafa con presunta participación de funcionarios
El fiscal de la causa señaló a ABC Color, que la primera hipótesis con relación a la empresa EISA, contratista de esta obra, es una eventual estafa y la presunta participación de los funcionarios en ese hecho. “La primera hipótesis con relación a la empresa es una eventual estafa y la participación de los funcionarios en ese caso. A la par estamos analizando si hay otros hechos, ya sean como elementos de la estafa o independientes a eso”, expresó.
Al mismo tiempo indicó que en este momento ya cuenta con casi toda la documentación que requirió en su momento y que están en un etapa de análisis para poder tomar una decisión. Señaló que la investigación abarca a la empresa y a funcionarios de la Dinac.
“Pedí colaboración de otras instituciones, también hay un informe que falta llegar desde la Secretaría Nacional Anticorrupción (Senac), además del informe de Contraloría”, expresó Cabrera.
Según la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP), del monto de contrato de G. 19.284.012.969 de EISA (incluyendo una adenda de G. 3.190 millones) se ha certificado y pagado por un valor de G. 18.347.408.516, monto que representa el 95,14% del total contratado.
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Instituciones corroboraron incumplimientos
La Dinac, la Contraloría y la DNCP elaboraron informes que revelaron varios incumplimientos en la ejecución del contrato del EISA. Por ejemplo se constató que fueron certificadas obras no realizadas en algunos casos y en otros trabajos que no cumplen con las cantidades exigidas en el pliego.
También se comprobó un retraso importante en el plazo de ejecución de la obra de 343 días, lo que implicaba una multa a ser aplicada es de G. 6.013 millones a la empresa. Por esta razón, EISA fue sancionada en enero último, con una inhabilitación de seis meses para contratar con el Estado, porque actuó de “mala fe”, según Contrataciones.
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Otro contrato para terminar obras que faltan
La Dinac realizó otra adjudicación para poder completar los trabajos que faltan en el espigón norte del aeropuerto, además de reparar las obras “chapuceras” que dejó la empresa EISA, según informó el ente. Esto para que se pueda habilitar esta parte de la terminal aérea, lo que se daría en mayo, informó el presidente de la Dinac, Félix Kanazawa.
De acuerdo con los datos, la empresa Agroindustrial Tacuara SA, presidida por Julio César Villalba Argüello, se encargará de ejecutar los trabajos que hagan falta por G. 758 millones. El contrato se firmó el miércoles 29 de marzo último.
Recién ahora Contraloría informó posibles hechos punibles a Fiscalía
La Contraloría General de la República (CGR) recién ayer remitió al Ministerio Público el informe que realizó sobre el espigón norte del aeropuerto Silvio Pettirossi, en el que el ente de control corroboró una infinidad de irregularidades en el ejercicio fiscal del 2020.
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En este sentido, el resumen que la CGR remitió a la Fiscalía, resaltó que en las verificaciones “in situ” realizadas entre el 02/10/2020 y el 10/12/2020 se constató que las cantidades certificadas en esa oportunidad eran distintas a las que efectivamente ejecutadas, en contravención al punto 17.1 de las condiciones generales del contrato.
En este caso, el ente contralor resaltó que “el control poco eficaz de los funcionarios intervinientes propició la certificación y pago de cantidades diferentes a las realmente ejecutadas”. Asimismo señaló que se tiene así una diferencia de G. 4.712 millones pagados de más con relación a lo realmente ejecutado.
El ente contralor también informó a la fiscalía sobre otro contrato de la Dinac para la “Adquisición de Ayudas Visuales” del aeropuerto Guaraní, en el que “se constató la certificación y pago de cantidades de obras diferentes a las realmente ejecutadas”. El perjuicio en este caso fue por más de G. 800 millones.