Si comparamos las cifras correspondientes al 2022 con los del mismo lapso del año pasado, concluiremos que la energía que cedió nuestro país se incrementó en un 28,14%, de 3.265 GWh a 4.645 GWh.
Entre enero y octubre de 2021, de los 5.571 GWh (1 GWh = 1000 MWh) que correspondían al Paraguay, la ANDE aprovechó 1.946 GWh, el 34,9% y cedió 3.625 GWh, el 65%, de acuerdo con los datos que obtuvimos en las mismas fuentes.
Por consiguiente, entre los diez primeros meses del año pasado y los diez del presente, la tasa local de aprovechamiento de la energía paraguaya en Yacyretá experimentó un llamativo retroceso, del 34,9% en 2021 al 26,7% en el ejercicio en curso.
Como es lógico concluir, en la contracara de esta singular moneda, observamos que la tasa de cesión al sistema argentino aumentó del 65,1% en 2021 al 73,3% en 2022.
Un valor distante del que rige en el mercado
La contraproducente - para el Paraguay - práctica de la cesión de energía en las binacionales, que los negociadores del 2017, inclusive los paraguayos, volvieron a incluir en la Nota Reversal de revisión del Anexo C del Tratado de Yacyretá, representa para el fisco paraguayo apenas US$ 8,6/MWh -promedio de los 28 años de comercialización de la energía de esta central-, muy distante de los valores de mercado.
La última semana, el director paraguayo de la entidad, Nicanor Duarte Frutos, luego de reunirse con el nuevo ministro de Economía de la Argentina, Sergio Massa, informó que la actual administración argentina retirará ese instrumento del Legislativo.
En lo atinente a la producción de Yacyretá entre enero y octubre de este año , la misma se incrementó en 13,8% este año respecto al 2021, una benigna consecuencia del período de lluvias y por de crecida del río Paraná.