Llamosas adelantó ayer a ABC que todavía no tenían una mayor información sobre las modificaciones introducidas por la Comisión Bicameral de Presupuesto del Congreso al proyecto de presupuesto 2023, debido a que los datos se están cargando de a poco en el sistema.
Expresó, sin embargo, que de acuerdo a las declaraciones efectuadas por el diputado Arnaldo Samaniego, presidente de la bicameral, y de las publicaciones en los medios de prensa, rescatan como hechos positivos que se mantuviera el tope de déficit fiscal y del gasto público.
Destacó que la referida comisión aprobó elevar el déficit de 1,5% a 2,3% del PIB como lo solicitó Hacienda, porque esto permitirá ejecutar inversiones para apoyar la economía; y que a su vez, se mantuvieron dentro del referido tope, porque tenían cierto temor de que se dispare por los numerosos pedidos planteados.
El ministro también rescató como positivo que las modificaciones se realizaron dentro del límite de gasto establecido, pero dejó en claro que para tener una postura al respecto a las modificaciones en general deberán primero chequear cómo se conformó el fondo, qué se recortó y de que instituciones, si no se modificó la estimación de ingresos, así como las reasignaciones efectuadas y su impacto, principalmente en lo que se refiere a servicios personales (salarios y otros gastos de personal).
Llamosas expresó a ABC que una vez que tengan disponible todos los datos en el sistema presupuestario, sentarán postura sobre los cambios recomendados por la comisión bicameral y, de ser necesario, las acciones a encarar ante las cámaras que este mes empezarán a tratar el tema.
Dictamen de la comisión bicameral
La comisión bicameral el último lunes elevó su dictamen sobre el proyecto de presupuesto 2023 a consideración de la Cámara de Diputados, que estudiaría en sesión extraordinaria el jueves 10 del presente mes, para luego remitir su decisión a la Cámara de Senadores.
El dictamen no incluye aumento salarial general para los funcionarios, pero sí una “nivelación salarial”, “equiparación salarial” y creaciones de numerosos cargos en diversas instituciones que harán más rígido el gasto público.
Para realizar las modificaciones la bicameral creó un fondo de US$ 50 millones y reasignó estos recursos a diversas entidades, favoreciendo principalmente a la Corte Suprema de Justicia, la Fiscalía, el Ministerio de la Defensa Pública y las universidades nacionales.
Además de inversiones, compra de equipos, mantenimiento y otros gastos de capital incluidos, también destinaron fondos a servicios personales para “equiparación salarial” y “nivelación salarial” para un determinado grupo de funcionarios, pago de bonificaciones, gratificaciones, jornales, seguro médico y numerosas creaciones de cargos que harán más rígido el gasto público el próximo año.
El proyecto de presupuesto asciende a G. 105 billones (US$ 14.792 millones) al ampliarse el tope de déficit fiscal de 1,5% a 2,3%, que fue solicitado por el Ejecutivo.