En el lapso comprendido entre el 7 de febrero y el 3 de agosto del presente año, nuestra socio, por partes iguales, en la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) abonó US$ 60.366.716,42, en once cuotas que en promedio sumaban US$ 5.487.883,3.
De acuerdo con las fuentes consultadas, el saldo deudor de referencia considera las facturaciones realizadas hasta julio último y los pagos efectuados hasta el presente mes.
El martes 3 de este mes, las oficinas locales de la EBY registraban una remesa argentina, en concepto de compensación por cesión de energía, de US$ 5.872.349.
Lea más: Yacyretá: deuda, morosidad y postergaciones una conducta que continúa
El Art. XIII del Tratado de Yacyretá, reconoce “a cada uno de ellos” -en rigor siempre fue a la parte argentina- “el derecho preferente de adquisición de la energía que no sea utilizada por el otro país para su propio consumo” - según la experiencia, admitida por la parte paraguaya, ese derecho fue exclusivo-.
Pagan US$ 3/MWh, más factor de ajuste
El numeral 5,1 del Anexo C del Tratado de Yacyretá -aún vigente- establece que el monto de la compensación es de US$ 2.998/GWh, o sea US$ 3/MWh, más el correspondiente factor de ajuste, que en 2022 osciló entre US$ 10 y US$ 13/MWh, según las fuentes consultadas.
Lea más: Yacyretá generó 3% más este año, pero el consumo de la ANDE fue del 17%
La crisis energética provocada por la sequía demostró el valor real de la energía de un complejo como Yacyretá. De acuerdo con el seguimiento hecho por especialistas compatriotas, el MWh entregado por Argentina al sistema eléctrico brasileño llegó a cotizarse en alrededor de US$ 250/MWh.
El invierno, que invirtió los roles, demostró que ese valor estuvo plenamente vigente y, además, la visible ausencia del Paraguay, socia por partes iguales en las hidroeléctricas binacionales, en la hora clave de la distribución de sus beneficios.