Acaray, la pequeña central hidroeléctrica de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), suministró entre enero y junio de este año 283.985 MWh (1 MWh = 1000 KWh), mientras en similar período del ejercicio anterior entregó 420.772 MWh. La profundidad de la caída por ende mide 136.787 MWh.
Si la medición la practicamos desde la perspectiva de su participación en la cobertura del consumo nacional, apenas arañó el 3% -2,79% en rigor -, mientras que entre enero y junio del año pasado fue del 4,59%.
Debe apuntarse también que la demanda del Sistema Interconectado (SI) de la ANDE, que incorpora la exportación de una pequeña cantidad de la energía de Acaray a la Argentina, aumentó 11,2% en el primer semestre de este ejercicio -10.195.841 MWh Vs. 9.168.574 MWh-, no obstante, reiteremos, la producción de usina nacional mermó 32,5% (136.787.000 KWh).
En lo concerniente a la exportación de energía paraguaya, en rigor la única actividad comercial paraguaya en el mercado eléctrico que debe incluirse en su catálogo de exportación real, no la cesión de excedentes, como ocurre en Itaipú y Yacyretá, la correspondiente al primer semestre de 2022, comparada que la del mismo lapso del año pasado, se redujo en un 9,5%.
También la exportación se redujo
Según los registros del Viceministerio de Minas y Energía, en el primer semestre de 2021, la ANDE exportó a la Argentina 71.156 MWh (16,9% del total que suministró al SI en ese semestre, en tanto que entre enero y junio de este año vendió a nuestros vecinos y socios en Yacyretá, 64.417 MWh.
Esa reducción, llamativamente, se observa en una coyuntura en la que el sistema argentino importaba electricidad del Brasil con tarifas que, en momentos arañaban, los US$ 300/MWh y tasas de peaje eléctrico próximos a los US$ 30/MWh.