Ni siquiera se puede caminar por la vereda de las calles Santísima Trinidad y Sacramento, debido a que los dueños de la propiedad que se observa en la foto colocaron una cantidad de ramas en la vereda. Esto, con el objetivo de impedir que la gente estacione sus vehículos.
Este obstáculo que pusieron, a la vez, impide que los peatones caminen libremente por la vereda, un derecho que tienen como ciudadanos.
José Duarte