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“Es una medida cautelar que prohibía tratar a la Junta, planteada por ellos mismos. Entonces, somos idiotas; nos hacemos idiotas o permitimos que nos traten como idiotas”, afirmó el concejal Herminio Corvalán, presidente de la Junta Municipal de Ciudad del Este, sobre una de los tantos aspectos jurídicos que pisotearon los siete concejales que respaldan al clan Zacarías.
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Igualmente, Corvalán citó la serie de violaciones al reglamento interno de la Junta, como el hecho de que sesionaron fuera del recinto sin tener la mayoría suficiente para legalizarlo y además, supuestamente, lo relevaron a él del cargo de presidente de la Junta.
“Empezaron a proceder a destituir al presidente de la Junta, que está vivo y coleando y con buena salud; ese es el primer error garrafal. Luego aceptaron la renuncia que sigue vigente en estrados judiciales, porque tiene una medida cautelar firme y no correspondía tratar porque prohibía a la Junta tratar esa medida; ese es otro error”, insistió el concejal, citando las irregularidades.
La destitución de un presidente de la Junta solamente se puede hacer por mal desempeño en sus funciones, ausencias reiterativas o imposibilidad por salud o fallecimiento. Además, el artículo 78 del reglamento interno es el que establece que se requiere una mayoría de ocho de los 12 miembros de la Junta para sesionar en un lugar distinto a la sede oficial, algo que no tenían los adherentes de McLeod.
No obstante, se Herminio Corvalán mostró optimista en cuanto a que la justicia revierta estas burdas irregularidades realizadas por el clan ayer. “Estoy seguro de que se va a revertir esto, y se tiene que tratar en Diputados la intervención”, afirmó.
Dijo que esto de la intervención no puede terminar así, ya que existen indicios serios de hechos punibles.