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El intento del oficialismo por recuperar la presidencia de la Cámara de Diputados y la representación ante el Consejo de la Magistratura durante la sesión ordinaria no prosperó pese a la alianza entre colorados cartistas, liberales llanistas y el Frente Guasú debido a que el proyecto de resolución que modifica los artículos del reglamento fue presentada en el estadío de oradores como una moción de privilegio, por el diputado Mario Soto Estigarribia.
Pese a que durante la votación lograron mayoría, con un total de 43 votos a favor (33 colorados y 10 liberales y uno del Frente Guasu), el presidente de la Cámara de Diputados, se plantó en que no corresponde el tratamiento del proyecto por la vía planteada porque no corre riesgo la inmunidad de diputados. La solución, dijo, sería girar a comisiones el proyecto, dictaminar sobre el mismo y convocar a una nueva sesión para su votación.
Esta posición generó mucho nerviosismo y varias idas y venidas entre los legisladores oficialistas y disidentes que incluso llegaron a ofenderse unos a otros.
La situación llegó a insultos y amenazas entre parlamentarios, por lo que Hugo Velázquez decidió levantar la sesión por la falta de condiciones de seguir en la sala.
El titular de la Cámara de Diputados había denunciado días atrás que la intención del cartismo de sacar la representación que tiene Ríos ante el Consejo es con el objetivo de controlar la elección de la terna para elegir al nuevo fiscal general, dijo en una comunicación que mantuvo con ABC Cardinal 730 AM.