Urrutigoity, en la mira de la Fiscalía

El sacerdote Carlos Urrutigoity está en la mira de la Fiscalía luego de que se lo asociara con casos de abuso sexual y pedofilia. Agentes fiscales esperan recabar más informaciones para encaminar la investigación.

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La fiscala de la Niñez de Ciudad del Este, María Graciela Colmán, confirmó a ABC Color que se solicitó informes a medios escritos locales sobre los antecedentes de casos que involucran al sacerdote argentino Carlos Urrutigoity.

Los informes fueron solicitados atendiendo a que no hay un denunciante identificado, explicó la fiscala. Entonces, se investigará si existe una posible víctima, dado que el cura fue denunciado en Estados Unidos, Argentina y otros países por supuestamente haber cometido casos de pedofilia y de abuso sexual.

El religioso en estos momentos es el número dos en la Diócesis de Ciudad del Este, a cargo de monseñor Rogelio Livieres Plano, quien desde que lo recibió en el 2008, lo defendió férreamente. 

Antes de llegar a Paraguay, el sacerdote argentino sorteó varias denuncias de abuso sexual, acoso y de pedofilia en diferentes partes del mundo.

Cuando enseñaba en un seminario en al Argentina, en la década de los '80, se registraron “comportamientos incorrectos” en Urrutigoity, por lo que el obispo Andrés Morello pidió su traslado.

Así fue a parar a otro seminario, en Winona, Minnesota, en Estados Unidos, pero con la recomendación de que el mismoa debía ser “monitoreado”, de acuerdo a lo que expresa una denuncia presentada a la Corte Distrital de Pennsylvania.

En Minnesota fue acusado de acosar a un seminarista, por lo que lo expulsaron nuevamente. Luego lo admitieron en la Diócesis de Scranton (Pennsylvania), a pesar de saltaron otros varios casos de “extraña y anormal influencia en los seminaristas y sacerdotes”.

En 1999 se ordenó a Urrutigoity cumplir funciones en una fraternidad de la Diócesis de Scranton y en la escuela de niños, la Academia de San Gregorio, donde conoció al estudiante John Doe, quien era menor de edad.

En 2002, el distrito de Pennsylvania admitió la denuncia de John Doe y su familia contra los padres Eric Ensey y Carlos Urrutigoity, por asalto y agresión, así como imposición intencional de angustia emocional.

“El padre Carlos Urrutigoity y el padre Eric Ensey cultivaron relaciones íntimas con estudiantes de San Gregorio, proveían de bebidas alcohólicas a menores de edad continua e insistentemente y dormían con ellos”, detalla la denuncia.

Finalmente, la Diócesis de Scranton pagó una millonaria indemnización a la víctima para finiquitar el juicio. La cifra ronda los US$ 450.000, según varios medios de prensa de ese país. 

No obstante, Urrutigoity fue expulsado y enviado a la Diócesis de Ciudad del Este, donde fue recibido por el obispo Livieres Plano. Allí ejerce un ministerio donde enseña a jóvenes, y tiene un alto cargo.

Las diferencias entre Livieres y el arzobispo de Asunción, Monseñor Pastor Cuquejo, saltaron nuevamente luego de que el primero defendiera al cura argentino.

Cuquejo había sugerido que, ante las nuevas denuncias contra el sacerdote, se retomasen las investigaciones y se aclare el caso, a lo que el obispo de Ciudad del Este respondió que el arzobispo no tiene por qué opinar, siendo que pesan sobre él denuncias de homosexualidad.

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