Una esperada visita alegra al país

Emoción, cánticos y gritos mientras ondeaban pañuelos blancos se pudo observar cuando el papa Francisco iba camino a la Nunciatura Apostólica.

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El papa Francisco participó de una ceremonia de bienvenida de casi media hora. Tras subir al Papamóvil, alegró a los miles de fieles que se apostaron a lo largo de las avenidas de salida del aeropuerto Silvio Pettirossi e hizo una breve parada en el penal de mujeres El Buen Pastor.

Familias enteras se empaparon mientras aguardaban el paso del vehículo, finalmente el cielo se fue despejando y los rayos del sol se mostraron tenuemente. El camino del papamóvil fue acordonado casi en su totalidad por voluntarios que llegaron a esos sitios caminando varios kilómetros desde muy temprano en la mañana, en medio de la lluvia.

El Papa se mostró en todo el trayecto muy sonriente mientras ondeaban los pañuelos blancos y las banderas del Vaticano y de Paraguay. Muy pocos lograron saltar el vallado de seguridad, pero no consiguieron detener a la comitiva.

En el penal un coro de internas lo recibió con un tema musical compuesto especialmente para ese momento. Tras saludar a alguna de ellas y darles la bendición abordó nuevamente el móvil papal y se dirigió a la Nunciatura Apostólica, donde pernoctará este viernes y el sábado.

En su agenda oficial de este viernes se espera aún el encuentro con el presidente Horario Cartes, con las autoridades de los tres poderes del Estado y posteriormente su mensaje de arribo a nuestro país.

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