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Más conocido como Beto Ovelar, este legislador de extracción colorada fue grabado en abril pasado, días antes de las elecciones generales, cuando buscaba la reelección, negociando la compra de votos con un dirigente liberal.
Ovelar en aquella ocasión evitó conversar con la prensa sobre lo ocurrido. Sin embargo, al día siguiente de la publicación en nuestro medio, la Cámara de Senadores suspendió durante dos meses sin goce de sueldo al parlamentario.
De todos modos, Beto Ovelar logró la reelección.
Ahora el senador vuelve a ocupar las portadas de los medios de comunicación, pero no porque haya tenido un radical cambio en su conducta, sino porque fue descubierto en otra de sus hazañas.
Ovelar se constituyó ayer martes en la oficina de la ministra de Educación Marta Lafuente y a pesar de que no contaba con cita, antepuso su urgencia a la del embajador de los Estados Unidos, quien sí tenía cita.
La premura del senador era exigirle a la secretaria de educación que designe a sus correligionarios en cargos de coordinaciones, a lo cual Lafuente respondió que los candidatos que este le presentó no reunían los requisitos.
Ovelar entonces elevó la voz e increpó a la ministra, golpeó la mesa y le dijo “yo conozco tu equipito de técnicos”, en referencia a quienes se encargan de elegir a los funcionarios.
Inicialmente el parlamentario negó dicho incidente, pero hoy reconoció que pidió cargos e incluso pidió -de forma pública- disculpas a Lafuente.
Esta última brindó una conferencia de prensa esta tarde y luego de su informe sobre la situción del Ministerio, fue consultada sobre el tema y contestó que actitudes como las que tuvo Ovelar ocurren a diario con las mujeres en las oficinas del Estado.
Agregó que Ovelar se disculpó también en privado y dijo que se debe lograr la trasformación de ese tipo de prácticas.