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El plan del directorio de la Essap es acondicionar la oficina de los sindicalistas para una sala de lactancia para las funcionarias, como lo dispone la Ley 5.508.
El enojo de los sindicalistas consta en una nota remitida a la Itaipú, entidad que solventa los gastos de acondicionamiento de la sala de lactancia.
El directorio resolvió trasladar a los sindicalistas a un "espacio reducido, sin consulta previa, donde estarán hacinados y sin las condiciones de privacidad que merecen los gremios”, según la nota enviada al director de Itaipú, James Spalding.
Aclaran que “no están en contra del proyecto sino por la manera prepotente e inconsulta que se realizó”.
La Essap, que posee alrededor de 2.000 funcionarios para unos 400.000 usuarios, cuenta con doce sindicatos. Los gremios se fueron disgregando por los enormes beneficios que consiguen los líderes.