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“Estoy grabando este video desde un lugar indeterminado, donde estoy escondido. Estoy escondido porque tengo datos ciertos, fidedignos, de que sicarios han sido contratados para asesinarme”, dice al inicio del video Luis Felipe Villamayor, padre del joven Alejandro Villamayor, asesinado a los 16 años de edad.
‘Alex’ murió en la propiedad de Michael Hofstetter (49) por el disparo de un revólver Smith & Wesson calibre 38 que impactó en el lado derecho de su cráneo. El caso, en un principio fue caratulado como suicidio, sin embargo, luego de varios indicios, fue acusado como autor del disparo René Hofstetter (22), quien, el año pasado, fue declarado culpable y condenado a 12 años de cárcel.
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“Quién le ha puesto precio a mi cabeza es la familia Hofstetter”, asegura el exdiputado y acusa directamente a René Hofstetter, recluido en el penal de Encarnación; a Michael Hofstetter -padre de René-, quien cuenta con orden de captura y aparentemente está en nuestro país; y a Cristina Hofstetter -madre del condenado-, quien “actúa como ejecutora de la logística, entrando y saliendo del penal”, según su relato.
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Villamayor menciona que los sicarios asignados para “esta macabra tarea” tienen vínculos con el Primer Comando da Capital (PCC) y fueron contratados desde el interior del penal de Encarnación por el mismo René. “Los objetivos de estos sicarios son dos personas: quien les habla y quien fuera el fiscal de la causa contra René Hofstetter, Enrique Amadeo Díaz”, afirma en el video titulado “Atentado”, publicado en Facebook por su esposa, Lourdes Servin.
Luis Felipe Villamayor se encuentra bajo la custodia del Ministerio de Interior desde hace ocho días aproximadamente debido al peligro que corre su vida y la de sus familiares. “Estos datos provienen directamente (...) del ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, a quien posiblemente le debo la vida”, declaró con seguridad.
Asimismo, dijo de que si él o alguno de sus familiares es víctima de algún asalto, bala perdida o incluso la caída de un rayo, hace responsable a la familia Hofstetter. “Y les aclaro que no tengo intención alguna de suicidarme”, proclamó.