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Los antecedentes de Benítez se remontan al año 1993 cuando se emitió una orden de captura en Nueva Germania, por un supuesto hecho de homicidio con arma de fuego en el que resultó víctima José Domingo Gaona, sin embargo el caso no prosperó.
En 1997, otra vez fue librada una orden de captura, esta vez por el Juez de Coronel Oviedo, por la causa denominada Eustaquio Martínez y otros sobre homicidio en Nueva Germania”.
En junio de año 2000 se dispuso su prisión preventiva en San Pedro, por un caso de asalto a mano armada, secuestro, e intento de homicidio, hecho por el cual fue recluido en la Penitenciaría Regional de San Pedro del Ycuamandyyú.
Tras esta detención, que también incluyó un allanamiento a su vivienda, el dirigente estuvo fuera de las actividades por un tiempo, y volvió a tener protagonismo en la presidencia de Nicanor Duarte Frutos (2003-2008).
En noviembre del 2004 se dictó prisión preventiva para Benítez, por un caso de perturbación de la paz pública, amenaza de hechos punibles, incitación a cometer hechos punibles, asociación criminal y otros delitos, tras una ocupación en General Resquín.
En el 2005 el dirigente campesino obtiene medidas alternativas a la prisión, dispuestas en el mes de abril, con lo que consigue librarse de la cárcel. Lo llamativo es que el dirigente cuenta con antecedentes en diferentes juzgados promovidas por varios fiscales por invasión, entre otros delitos, pero la mayoría de los casos nunca fueron resueltos.
Un informe de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) de fecha 30 de marzo de 2009, remitido a la oficina del Gobierno norteamericano para la lucha contra las drogas (DEA), vincula al dirigente campesino Elvio Benítez con un grupo criminal dedicado al tráfico de marihuana en la zona de San Pedro.
Según el informe, Acosta y Benítez habrían comercializado el 2 de abril de 2009 un cargamento de 15.000 kilos de marihuana prensada. Dicha droga sería enviada en un camión de gran porte disimulada entre maderas aserradas, con destino a Ciudad del Este.