Cargando...
Juan Carlos Penoni, jefe de División de Asuntos Legales del Banco Central del Paraguay (BCP), indicó que -pese a las numerosas críticas- Hugo Javier Portillo Sosa no quebrantó artículo alguno de la Ley General de Bancos.
La normativa Nº 861 establece una serie de incompatibilidades e inhabilidades para los directivos de entidades financieras; sin embargo, ninguna hace referencia a la participación en operativos tácticos junto a agentes de seguridad.
En su inciso C, la ley incluso hace una excepción y aclara que las restricciones para ocupar el alto puesto apuntan a “los que ejerzan cargos en los poderes del Estado, con excepción de la docencia y las asesorías consultivas y técnicas”.
Justamente, el ministro de la Senad, Luis Rojas, aseguró que Portillo era su “asesor” en la lucha contra el EPP, aunque reconoció que lo acompañó a un operativo en campo de combate.
Al respecto, Penoni mencionó que existe una laguna legal, ya que no se establece prohibición ni autorización alguna.
“No hay ninguna limitación legal ni normativa para que él pueda desempeñarse o realizar estas actividades. La ley de bancos no establece nada. Es algo híbrido, hay una laguna al respecto”, manifestó, en conversación con ABC Color.
Indicó que el BCP no puede tomar medida alguna, ya que no se quebrantó ninguna regulación.
“El hecho de participar de algo así tampoco le perjudicaría en el aspecto de sus funciones de directivo, porque no hay limitaciones”, aseveró.
Explicó que las restricciones para los gerentes de bancos hacen referencia más bien a aspectos de su actividad económica ajena al cargo.
“La ley de bancos establece limitaciones sobre su actividad económica, pero no en ese sentido (su participación en un operativo policial-militar)”, insistió.
Aclaró que desde la División de Asuntos Legales del BCP solo puede referirse a la normativa Nº 861, que regula las entidades financieras y la actitud de sus directivos.
Indicó que no puede expedirse respecto a si Portillo quebrantó o no normativas de otros ámbitos, como las referentes al manejo interno en la Policía, las FF.AA. o la Senad.
El ministro de la Senad, Luis Rojas, fue quien decidió llevar al gerente al banco Amambay, propiedad del presidente Cartes, a un operativo de combate contra el EPP.
Portillo no solo “asesoró” a la entidad antidrogas, sino que formó parte de la columna armada de la institución, en un fallido operativo contra el “segundo cuerpo” del EPP, en el asentamiento Núcleo 5 de la localidad de Arroyito, Horqueta.
Agentes de la Policía manifestaron su molestia con la presencia del bancario de Cartes e incluso responsabilizaron del fracaso a su participación.
Para Rojas, las críticas por dar participación a un civil en las tareas de lucha contra el EPP constituyen una “boludez”.
Aunque no hay explicaciones claras sobre cuál sería el aporte de un bancario en los operativos de seguridad, aparentemente el mérito sería su afición a las armas y su condición de gerente general de un banco de la familia Cartes.
El ministro del Interior, Francisco de Vargas, reconoció que Rojas incurrió en una irregularidad, por lo que pidió que se investigue su conducta.