Cargando...
“Para aquellos que no asimilan que (disparar al aire) es un crimen, queremos que todos se hagan eco. A mí me tocó esa vez, pero podría pasarle a cualquiera”, lamentó Liz Marlene Vera, la madre de la pequeña cuyo caso aún no está cerrado. Ella es la vocera de la campaña #NavidadSinBalas, que busca concienciar a las personas sobre el peligro de las balas perdidas y la necesidad de que se denuncien los casos. La consigna es difundir el mensaje a través de las redes sociales con el hashtag mencionado, posteando además la fotografía del pesebre familiar.
“Es para crear conciencia de lo trágica que puede ser una Navidad con los disparos al aire. Muchas familias pueden salir perjudicadas. Lastimosamente, todo lo que me pasó fue tan duro. No queremos que se repita”, reflexionó Liz Marlene en entrevista con ABC Color. Ya pasaron dos años de la muerte de su pequeña hija, hecho que en su momento conmocionó a la ciudadanía. Sin embargo, la madre aún cree que no hay conciencia sobre el peligro de efectuar disparos al aire. “No sé si se creó conciencia… Hay gente que sigue pensando que esto es un juego”, lamentó.
Para Liz Marlene, esta época del año es aún más difícil de afrontar que el resto de los meses. Pero esta Navidad será aún más particular, ya que el dilatado juicio oral y público por la muerte de su pequeña hija finalmente tiene fecha: el 18 de diciembre. El juez Tadeo Fernández venía postergando el juicio porque “había casos más importantes”, comentó la madre de la niña.
“Es muy duro saber que para los jueces una vida no significa nada”, dijo. A tan solo una semana del 25 de diciembre, Liz Marlene deberá recordar todo lo que sucedió aquella Nochebuena en la que su hija perdió la vida. Lamentó que el sindicado como responsable de haber disparado al aire, el taxista Jorge Prisco, sigue ejerciendo su profesión como si nada. A pesar de tener prisión domiciliaria, el mismo trabaja en su móvil, según muchos conocidos le dijeron a Liz. “La justicia acá es demasiado débil”, resaltó.
Paz Valentina falleció tras recibir un disparo cuando jugaba en el patio de su casa del barrio Santa María de la capital, el 25 de diciembre de 2012. De las averiguaciones realizadas en torno al caso resultó detenido Prisco, quien admitió haber efectuado disparos al aire desde su vivienda, ubicada a cuadras de donde estaba la niña.