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En otro momento la autoridad departamental manfiestó en contacto con ABC Color “la policía esta rebasada en su fuerza” y “no puede enfrentarse en esta situación a ellos” porque muchos de los agentes ni siquiera cuentan con chalecos antibalas. Añadió que son varios uniformados los que ya pidieron ser trasladados a otras dependencias.
La problemática radica en que uno ya no puede estar por la calle porque “no sabes de dónde van a venir los disparos”. Cuestionó la forma de actuar de las autoridades del Estado “parece que no se toma en serio esto”. Cabe recordar que Pedro González, tras el asesinato de Rafaat, dijo que solicitaría la militarización del departamento.
Sobre los sicarios “ellos continúan recorriendo por las calles sin problema” y lo peor es que las fuerzas del orden no pueden hacerles frente porque “el alto poder de fuego y las armas que tienen, es impresionante”. Muchos están expuestos a esta situación, entre policías y ciudadanos, y “el ministro del Interior (Francisco de Vargas) no me atiende”.
“La situación es de pánico acá” y para que se pueda hacer algo “tiene que venir gente especializada, para que trabaje con la gente de Brasil y actuar de forma conjunta”, consideró el gobernador del Amambay.