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La pastilla anticonceptiva de emergencia, más conocida como la pastilla del día después, no causa un aborto, no mata al embrión fecundado y contrariamente a ese argumento, proveniente de sectores religiosos, no afecta a un embarazo ya instalado, sino que “lo hace más fuerte”, según el ginecólogo Vicente Bataglia, docente y director de la especialidad en el Materno Infantil de San Lorenzo.
¿Por qué? Porque la píldora tiene entre sus compuestos, una hormona que se llama progesterona, la cual tiene como objetivo proteger el embarazo en caso de que exista, según explicó a ABC Color, el especialista.
La recomendación médica indica que la pastilla se tome poco tiempo después del coito, lo antes posible, actúa como barrera entre el óvulo y espermatozoide, de tal forma que no ocurra el embarazo.
“Cuando se toma, la ovulación se pospone o no se produce, entonces no se encuentran óvulos para el espermatozoide, por lo tanto no se produce el embarazo”, explicó el médico José Negrete a la 730 AM.
Agregó que “no es abortiva porque la pastilla abortiva quiere decir que el óvulo se fecundó y con la pastilla se elimina, pero cuando se produce la ingestión, no existe todavía ese encuentro entre el óvulo y el espermatozoide por lo tanto para nosotros no es abortiva”.
“Cuando hay un embarazo instalado no hace nada, ningún efecto tiene en la mujer”, recalcó por su parte Bataglia, quien a su vez señaló que es incorrecto nombrar a la pastilla como “del día después”, porque debe consumirse lo ante posible tras la relación sexual.
Señaló que la misma es recomendada en algunos casos como una violación, un preservativo roto o cuando no se planea un embarazo. Pero, resaltó que no puede utilizarse constantemente como un mecanismo de anticoncepción.
Si bien el Ministerio de Salud y el Hospital de Clínicas proveen los anticonceptivos de emergencia en forma gratuita, las mismas son de venta libre en las farmacias y vienen en presentaciones de dos pastillas y de una sola pastilla.
Son varios los laboratorios que producen las pastillas, las cuales se ofrecen a la venta en las farmacias desde G. 30.000, dependiendo de la marca.
Dichas pastillas, en su mayoría son altamente demandadas por el sector juvenil, quienes desconocen que el uso frecuente de dicha pastilla puede tener efectos secundarios, que no revisten gravedad.
En algunos casos, la pastilla puede causar vómito. Cuando la mujer vomita dentro de las dos horas de haber consumido la pastilla, entonces deberá consumir de vuelta la pastilla, debido a que con el vómito se puede expulsar el anticonceptivo.
También puede afectar el ciclo de menstruación o causar un poco de dolor en el bajo vientre. Ambos efectos secundarios tampoco revisten gravedad en la mujer.
"La pastilla se utiliza para evitar los abortos, estamos al revés de lo que la gente dice, no es para provocar un aborto, sino para prevenir los abortos", resalta Negrete.
El médico señala que la principal causa de muerte materna es el aborto. También explicó que en Paraguay la cifra de mujeres que mueren tras dar a luz es altísima. "De 10.000 partos, en 16 mueren las madres, en otros países es uno o medio, una de las razones de la mortalidad materna es el embarazo no deseado y el aborto", señala.
Para el médico, la política del Ministerio de Salud de proveer gratuitamente las pastillas es acertada porque así se evitarán embarazos no deseados y por ende los abortos mal prácticados.
"Los católicos van en contramano en ese sentido, porque defendemos la paternidad responsable, no el control de natalidad sino que la planificación familiar y al usar la pastilla se esta evitando el aborto y se evita más mortalidad materna", destacó.
Finalmente dijo que "existe un aborto por cada 4 partos, que es lo que conocemos, y es la mitad de lo que verdaderamente existe".