Querían audiencia exclusiva

Organizadores de la visita papal no previeron una audiencia exclusiva con los indígenas, según denunció un grupo de nativos. En 1988, Juan Pablo II incluyó en su itinerario al Chaco, donde visitó a miembros de la comunidad Santa Teresita.

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Pese a que miembros de la Federación por la Autodeterminación de los Pueblos Indígenas (FAPI) solicitó en tres ocasiones desde marzo, mantener una audiencia eclusiva con el papa Francisco, no recibieron respuesta alguna de la organización de la visita papal, según denunció a Efe Hipólito Acevai, presidente de la organización

Los miembros de la FAPI solicitaron mantener una audiencia con el pontífice para exponer las “violaciones a los derechos humanos” que padecen de forma constante. Entre estas violaciones, se encontrarían los “atropellos al derecho a las tierras” de los pueblos indígenas, especialmente por parte de “empresas y operadores de justicia que buscan el lucro”, según Acevai.

Por este motivo, decidieron no acudir al encuentro que el papa mantendrá con representantes de la sociedad civil este sábado en el estadio León Condou de Asunción y del que participarán otras comunidades nativas. “Nosotros somos pueblos, no nos incluimos en la categoría de 'sociedad civil'. Muchos nos dicen que vayamos a León Condou a ver si el papa se salta el protocolo y dialoga con nosotros... pero eso sería como quedarse parado esperando a que caigan migajas, y no estamos dispuestos”, enfatizó Acevai.

Argumentó que la intención de la FAPI era “replicar el encuentro” que el papa Juan Pablo II mantuvo en 1988 con indígenas de la comunidad de Santa Teresita, en el Chaco paraguayo.“Los indígenas fueron entonces una parte importante del cambio social de la dictadura a la democracia, y tuvieron espacio para comunicarse con el papa, un espacio que ahora se nos niega ” , contó el dirigente de FAPI.

Observó además que la organización de la visita papal introdujo en la agenda del papa hasta cuatro encuentros con religiosos, como las vísperas con los obispos en la catedral metropolitana y el almuerzo con los jerarcas católicos paraguayos, así como los que mantendrá antes de las misas multitudinarias de Caacupé y Ñu Guasu.

También tuvo en cuenta citas con colectivos específicos, como los pobres urbanos del Bañado Norte, a quienes visitará el domingo por la mañana, o los jóvenes, con quienes se reunirá en la avenida Costanera el mismo domingo por la tarde.

Sin embargo, no se hizo espacio para una reunión con los nativos que, según Acevai, sería “muy positiva” para trasladar al papa “la realidad de los indígenas” desde la “diversidad” de cultos que profesan, y que abarcan desde ramas del cristianismo como la iglesia evangélica o la protestante, hasta las religiones tradicionales.

Cerca de 116.000 personas, el 1,68 % del total de la población se reconocen como indígenas, el 76% de los cuales se encuentra en situación de pobreza extrema, según datos de 2014.

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