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La ministra de Educación, Marta Lafuente, se refirió a la resolución emitida la semana pasada por la cual se resolvió no remunerar durante los periodos de la llamada “licencia sindical”.
Explicó que el derecho de los sindicalistas no se eliminó, sino que se reglamentó, ya que hasta ahora todo se regía por “costumbres” y “soluciones al margen de la ley”.
Comentó que el MEC pagaba el sueldo a un total de 124 personas que no prestaban servicio alguno para el ministerio, sino que se dedicaban todo el año a actividades sindicales.
“Eran 124 personas que no estaban trabajando para el servicio educativo; estaban liberadas y trabajando exclusivamente para sus gremios”, manifestó.
Indicó que aunque la licencia sindical está consagrada en todas las leyes, en ninguna normativa se establece que tenga que ser con goce de sueldo.
“Si un sindicalista quiere dedicarse exclusivamente a su gremio, pues será su gremio el que le pague el sueldo, así no usamos el dinero del contribuyente para pagar esa asociación”, sostuvo.
Indicó que “en la ley de presupuesto, lo que no está permitido está prohibido. Mal podría un ordenador de gastos pagar una función que no se ejerce”, agregó.
Señaló que durante todos estos años que los sindicalistas gozaban de salarios sin trabajar se estaba recurriendo a “una solución al margen de la ley”.
Comentó que en ningún ministerio se permite la utilización de la licencia sindical y aun así pagar los salarios a quienes no prestan servicios durante los 365 días del año.
“No hay otro ministerio en el país que pague los 365 días sin que se ejerza función alguna. Y lo único que nos diferencia de los demás es el estatuto docente, pero ahí tampoco está consagrado esto”, sostuvo, en contacto con la 780 AM.
Indicó que quienes se acojan a este beneficio y, a la vez, deseen cobrar un salario, necesariamente deben prestar a la par un servicio para el MEC.
“No se suspende la licencia sindical. Lo que sí se hace es poner algunas condiciones y tiempos. Hay condiciones que cumplir”, manifestó.
Sobre la reacción de los sindicalistas, quienes incluso hablaron de una “guerra”, la ministra indicó que “si ellos quieren guerra, yo quiero transparencia”.
Al MEC le costaba un millón y medio de dólares mantener a docentes y funcionarios administrativos que finalmente permanecían sin trabajar para el ministerio durante todo el año, según datos brindados por la cartera de Estado.