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En la nota dirigida al Serenísimo Gran Maestro, Benigno Villasanti, se hace un recuento de la situación procesal del "hermano" José María Ibáñez. Aunque se consigna el reconocimiento de los delitos, "esto no disminuye ni menoscaba la gravedad del acto, ni lo eleva especialmente a quien lo reconoce", expresa parte del documento.
De acuerdo al pedido Ibáñez en su calidad de hermano y en ejercicio de un cargo público ha incurrido en todos los vicios que rodean al poder político y “tienen íntima relación con la falta de integridad y ética del referido hermano”.
“La orden no puede continuar aceptando que en nuestra sociedad, la que construimos en base a la libertad y las buenas costumbres tengan espacio personas que se alejan voluntariamente de los valores de la masonería”, refiere otra parte del pedido.
También recuerdan que el parlamentario colorado se aprovechó de la situación de vulnerabilidad de trabajadores humildes, para forzarlos a cometer hechos delictivos.
Por los argumentos mencionados, se exige a la máxima autoridad de la orden la exclusión de Ibáñez de los registros de la organización. A la vez solicitan una mayor prudencia al momento de elegir candidatos para el ingreso, anteponiendo las buenas costumbres, la integridad y la libertad.