Más adictiva que el opio

La nicotina del cigarrillo es mucho más adictiva que drogas ilícitas como el opio y la cocaína, advierte el Dr. Manuel Fresco, director del Centro de Control de Adicciones del Ministerio de Salud. Confronta con la postura del ministro sobre impuesto.

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“La nicotina es una de las drogas más adictivas, después están los opiáceos, la morfina, todos los derivados del opio generan una dependencia muy fuerte”, indicó Fresco, agregando que por ejemplo es una de las drogas más difíciles de combatir en el centro contra adicciones.

“Podés jalar cocaína y el tipo de dependencia que te genera es que perdés el control del consumo, cuando empezás a jalar no podés parar, pero la cocaína no es algo que tenés que consumir todos los días”, afirmó.

Con el cigarrillo sentís que “tenés que fumar todos los días, y el usuario de tabaco se despierta a la noche, fuma y se vuelve a dormir, y eso no pasa con la cocaína. El que quiere dejar de consumir tiene que bancarse la abstinencia, no hay esa reducción gradual, la mayoría de la gente que deja el tabaquismo corta de golpe y se tiene que bancar unos días las ganas, compulsión, ‘pirevai’ y no puede dormir. El periodo de desintoxicación es fuerte”, explicó el médico que difiere con la postura del ministro de Salud, que se mostró en contra del aumento del impuesto al tabaco.

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Fresco, como médico, es consciente de que las estrategias de lucha contra el consumo del cigarrillo como por ejemplo el plantear el aumento del impuesto y por ende del producto final, no es algo descabellado ya que provienen del la misma Organización Mundial de la Salud (OMS).

“El que gana plata tiene que saber que está ganando plata a costa de la salud de la gente que consume su producto. Ahora nomás se politizó esto porque el presidente es el dueño de la tabacalera (del Este) y se arma tanto quilombo, pero esa política de impuestos a estas sustancias no es que se inventó acá nomás en un momento electoral”, destacó.

Si bien considera que aumentar el precio no es suficiente incentivo para dejar de fumar “ya que el que ya está dependiente comienza a consumir productos de menor calidad. Entonces si consumías un cigarrillo que aumenta el doble, vas a comprar uno que sea más o menos del mismo precio que el anterior por más que sea una mierda y vas a seguir fumando”, explicó. Empero destacó que si desalienta el inicio del vicio.

Remarcó que además el objeto principal de aumentar es que se cubran los gastos que genera el consumo. “No es solo que apunta a reducir el consumo, sino que es generar fondos para poder dar respuestas a los problemas sanitarios que te provoca. Un paciente de cáncer o un paciente que tiene que recibir oxígeno sale muchísimo dinero y eso alguien tiene que pagar, ya que la salud pública es gratuita”.

El médico comparó este problema con otro de salud pública entre las mayores causas de muerte en nuestro país: los accidentes en moto. “El que te vende no sabe si vos saltaste del monopatín a la moto, no hay ninguna restricción, entonces hay que poner algo que dificulte, no que se prohíba, pero que no sea tan fácil tener una herramienta que haga que se te sature las salas de terapia intensiva y deje secuelas y gastos quirúrgicos”, apuntó.

El médico también se refirió a las consecuencias sobre la salud, resaltando que el tabaco no solo produce cáncer, que según resalta es una muerte más "benevolente", comparada con la otra consecuencia común, el enfisema pulmonar, que genera un deterioro lento y progresivo y la agonía de la falta de oxígeno.

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