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El negociado admitido con las notas reversales en la Cámara de Senadores y de Diputados puede ser revertido en el gobierno de Mario Abdo Benítez, según el exsenador Miguel López Perito. El mismo afirma que el acuerdo incumple el Tratado de Yacyretá y, por ende, puede ser denunciado valiéndose de la Convención de Viena, y anulado.
“Cualquier gobierno que venga puede hacerlo”, aseguró en contacto con ABC Cardinal. Además, afirmó que la situación es reversible, si el Gobierno “tiene voluntad de transparentar” la situación. “Se puede volver atrás. Esto es un robo al Paraguay, un atentado contra los intereses paraguayos. Tenemos que retrotraer y volver a cero. Es la única manera de superar este conflicto y no aceptar el sistema mafioso. Es un negociado clarísimo entre élites del gobierno paraguayo y Argentino. Acá lo que hay es una coima grandiosa”, cuestionó duramente.
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Asimismo, aseguró que Yacyretá fue tratada todo este tiempo como una empresa argentina, que manejaba la entidad en perjuicio del Paraguay. “En vez de recuperar nuestros derechos, nuestra energía, hoy resulta que estamos peor. Ahora sí, después de 40 años se patea la deuda a 30 años más y el Paraguay no tiene siquiera disponibilidad de energía”, criticó.
En otro momento, dijo que al pagar Paraguay lo que debía por “esa famosa deuda que nunca termina” podrá usar el 50% de su energía. “Se acabó la cesión de energía, la compensación por cesión. Nosotros, al no usar toda la energía que no corresponde, el 50% de Yacyretá, le cedemos a la Argentina por 9 dólares. Ese megavatio cuesta hoy en el mercado, el precio mínimo mayorista, 85 a 100 dólares. Estamos vendiendo por el 10% nuestra energía. Eso lo que quiere Argentina que se mantenga: que Paraguay le siga regalando la energía que no usa”, agregó.
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Por otra parte, se está difundiendo un audio en que Óscar Thomas, exdirector argentino de la Entidad Binacional Yacyretá, hablaba sobre el acuerdo que fue rechazado por el país ya durante el gobierno de Fernando Lugo.
“El nivel de angurria y de presión que había en Paraguay para que esto no se termine, señores, no tiene nombre. Hoy lo puedo decir. Estuve al borde del infarto varias veces, pero como esa semana y media hora antes del evento, nunca en mi vida. Nunca. Se me cayó la piel de las manos, de los pies. La taquicardia que tenía, la presión del sinsentido”, decía Thomas en una entrevista.
Afirmaba que no era cierto que se iba a regalar las deudas, como decía López Perito en ese entonces. Además, agregaba que no sabe por qué no se solucionaba el problema de las deudas y que había malicia detrás.
“Hoy hay una deuda, sí, con el Tesoro argentino. Pero nunca la Argentina le puso una pistola al Paraguay para cobrar esa deuda. Nunca. Ni lo hará. Pero sí querían cambiar un acreedor condescendiente, blando y contemplativo para Yacyretá por un acreedor privado, que tenemos que pagar US$ 700 millones por dos años y no ver nuestras turbinas. No hagamos Aña Cuá. Eso es lo que quieren para hacer un negocio financiero con una banca privada”, aseveraba en dicho audio.
Al respecto, López Perito explicó que el enojo de Thomas nace porque se rechazó, en ese entonces, la firma del preacuerdo. “La deuda de Yacyretá se genera porque la Argentina se fija unilateralmente una deuda mas baja, con la nota reversal del '92. El sistema de pago consistía en el pago. La EBY iba a pagar la deuda en 42 años, con energía a la Argentina, en vez de efectivo por. Eso extendía por 42 años más la imposibilidad de que el Paraguay tuviera libre disposición de su energía. El hecho de poder vender en el mercado la energía que a nosotros nos sobraba. Eso lo que la Argentina no quiso nunca”, explicó el exsenador.
Agregó que el acuerdo, en ese entonces, fue rechazado por Lugo. “Cuando llegamos nosotros al gobierno –te explico de dónde nace toda la bronca de Thomas- le dijimos: 'Muchachos, se acabó el recreo. La nota reversal del '92 no aceptamos porque fue rechazada por el Congreso. El preacuerdo nosotros no aceptamos”, relató.
Finalmente, López Perito recordó que la deuda de la Argentina con la Entidad Binacional es mucho mayor que la supuesta deuda que mantiene nuestro país con la EBY, por lo cual ese asunto no debe ser ignorado en las notas reversales.