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El macabro hallazgo tuvo lugar en la zona de Zanja Pytá. El cadáver, cuya identidad todavía no se conoce, presentaba signos de tortura. Al parecer, el hombre fue asesinado en otro sitio y posteriormente los autores lanzaron el cuerpo en el lugar.
No se sabe si el fallecido era de origen paraguayo o brasileño, aunque se sospecha que los victimarios fueron los miembros de un grupo llamado “Justicieros de la frontera”, quienes anónimamente habían anunciado que eliminarán a todos los delincuentes de la frontera.