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El fiscal Aldo Cantero dijo a ABC Cardinal que los informes del Instituto Nacional de Tecnología, Normalización y Metrología (INTN) y de la Facultad de Ingeniería UNA revelan que los lingotes no son de bronce ni contienen este metal como fue declarado, sino que son de plata con un cierto porcentaje de oro. “De 40 kilos (de metal) analizados, contiene 1,450 kg de oro; el porcentaje varía de acuerdo a cada lingote”.
Precisó que todo el metal fue extraído de Paso Yobái y, según los documentos incautados de los detenidos, un contrato especificaba que solo era para examinar a fines de determinar el porcentaje de oro que poseía, pero otro contrato ya firmado demuestra la intención de que iba a ser vendido completamente como oro.
Agregó que el cargamento completo iba a ser vendido solo como oro, por lo que incluso la carátula podría cambiar de contrabando a estafa. La fiscalía maneja varias hipótesis, entre ellas que el objetivo era engañar al mercado chino a través de la red de extranjeros o que los paraguayos intentaron estafar a los demás detenidos con los metales mezclados.
El principal intermediario en la operación es Manuel Portes Medina, de nacionalidad dominicana, conforme a las pesquisas, y la firma que comercializó los lingotes es San Cayetano, cuyo propietario está con paradero desconocido.