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El hecho ocurrió aproximadamente a las 02:30 de la madrugada, cuando la “Carroza de los 400 años” iba remolcada por una camioneta al mando de Mario Benítez (43).
Según la versión del chofer en sede policial, “repentinamente un sujeto de sexo masculino quiso abordar la carroza estando en marcha; perdió el equilibrio, cayó al pavimento y quedó bajo las ruedas”.
El relato de los jóvenes que iban con el ahora fallecido –y que estuvieron declarando ayer al mediodía en la Fiscalía- difiere completamente al del chofer. Refieren que Araujo iba caminando al costado del cordón, donde finaliza el sambódromo, que al girar el vehículo, el espejo de la camioneta le tocó el hombro y mientras protestaba, no se percató de la carroza, ni tampoco el chofer paró y le pasó encima.
Lo más grave –según los jóvenes- es que el conductor del rodado no paró después del accidente, sino que continuó y la Policía lo detuvo dos cuadras después. “La gente que iba en la carroza gritaba, pero el conductor no detuvo la marcha para auxiliar a Marcelo”, dijeron.
El joven, que vivía en el barrio San Roque de esta ciudad, pertenecía a la batucada “Iguana Samba Show” del Club Pettirossi, pero en la noche del viernes no participó, sino que se unió a sus compañeros al final del sambódromo.
La carroza es la misma en la que el el cuestionado diputado liberal Carlos Portillo pagó G. 150.000 para subir y donde se vio al parlamentario bailando.
El informe forense del doctor Aldo Von Nobloch da cuenta que la causa del deceso fue “traumatismo cerrado de cráneo”. Intervinieron en el levantamiento del cuerpo y las investigaciones primarias el perito de la sección Criminalística de la policía, suboficial Héctor Argüello, y el asistente de la Unidad 7 de la fiscalía, Luis Caballero.