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Hugo Andrés Monges (21), llegó a su tierra natal tras ser velado por unas horas en la Parroquia San Jorge de la exCaballería. En la mañana de hoy, su cuerpo sin vida llegaba desde la zona de Azotey, donde se encontraba asignado por disposición de sus superiores para estos días.
El arribo del los restos sin vida se produjo faltando unos minutos para las 20:00, según reporto el corresponsal de ABC Color, Mariano Godoy.
Desafortunadamente, durante su paso por el Norte se produjo en la noche del jueves un nuevo ataque del Ejército del Pueblo Paraguayo, cuyos integrantes operan principalmente en ese lugar.
Él, junto con dos miembros del EPP, caía abatido en un enfrentamiento ocurrido aproximadamente a las 20:00.
El humilde hogar está ubicado en el barrio San Francisco del distrito de José Domingo Ocampos, departamento de Caaguazú, en el Km 238,5 de la Ruta VII Gaspar Rodríguez de Francia.
Los limitados recursos de la familia se evidencian al observar la sencilla construcción, cubierta ahora con el rojo, blanco y azul de la bandera paraguaya, donde vecinos amigos y familiares contribuyeron para ambientar el lugar y recibir a un digno héroe de la patria.
La tristeza de los familiares de Huguito -como lo llamaban sus seres queridos- se puede notar en las miradas de dos de sus tíos, Silvino Monges y Daniel Monges, quienes relataron con orgullo que el joven siempre quiso ingresar a la carrera militar, meta que logró pero que por cuestiones del destino no duró mucho tiempo –hace un año y medio que egresó.
“El era una persona muy diferente, era estudioso y trabajador”, comentó Silvino Monges, teniendo en cuenta su desempeño en el colegio Juan José Soler, donde realizó sus cursos de primaria y secundaria.
Además de sus padres, Hugo Monges (52) y Porfiria Ramírez de Monges (42), forman parte de su familia tres hermanas menores, de 15, 7 y 3 años. Tiene además, dos hermanos mayores, Alcides y Antonia, que se encuentran retornando desde Buenos Aires para participar del último adiós.
De esta manera, además de los familiares, se encuentran en el lugar exprofesores, excompañeros, amigos y compañeros de fútbol, quienes serán testigos de la última marcha que protagonizará el joven uniformado, que el 6 de junio de este año habría cumplido 22 años.