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Santiago Leguizamón era periodista de radio Mburucuyá y corresponsal del desaparecido diario Noticias en Pedro Juan Caballero. Como un claro mensaje de la prensa, fue asesinado a balazos el 26 de abril de 1991 por sicarios, en el día del periodista.
Leguizamón era un valiente periodista que publicaba las acciones de narcotraficantes en la zona y denunciaba en la radio los hechos criminales. Según archivos publicados en internet, una de sus publicaciones estuvo relacionada al temible clan Jamil, liderada por Fahd.
El poco avance de las investigaciones hizo que se determinara como sospechosos de la autoría intelectual a Daniel Alvarez Georges y el sobrino Luis Enrique Georges.
El juez de Pedro Juan Caballero, José Valiente, en la década del 90 fue abogado del Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP), por lo que conoce todo lo relacionado al expediente del asesinato de Santiago Leguizamón.
En un informe de la Sociedad Interamericana de Prensa, Valiente detalló que el clan Jamil tenía nexo con el general Andrés Rodríguez (+), presidente de Paraguay en la primera parte de la década del 90.
Rodríguez era padrino de una de las hijas de Fad Jamil, lo que posibilitó el asesinato de Santiago Leguizamón y su posterior impunidad. Las publicaciones del periodista y su postura contra el narcotráfico, fue la posible causa de la muerte.
A 21 años del asesinato del hombre de prensa, la posible aparición en Ponta Porá de Fad Jamil – justo en abril – trae recuerdos de la muerte de un periodista que luchó por denunciar al narcotráfico.
De los tres autores materiales del asesinato de Santiago Leguizamón, sólo está con vida José Araulho, conocido como “Tiro Certo”. José Aparecido de Lima y Bras Vaz de Moura, fueron asesinados, según la investigación de José Valiente.
Daniel Alvarez Georges fue asesinado y nada se sabe del paradero de Luis Enrique Georges. Por lo tanto el único que queda vivo de aquella historia es Fahd Jamil.
Según datos brindados por el juez Valiente a la SIP, el caso de Leguizamón fue archivado en setiembre del año pasado, debido a que pasó 15 años del suceso. A esto se suma que el Brasil no extradita a sus connacionales, por lo que Jamil no será imputado.
En pocos días más se cumplirá 21 años de la muerte de Leguizamón, cuya causa no tiene procesados y muchos menos condenados.
En pocos días más puede aparecer por Ponta Porá, Fahd Jamil, aunque quizá con el mismo poder de hace 21 años. La justicia brasileña extinguió una condena que pesaba sobre "el padrino".