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Los talleres de la empresa Ivesur, encargada de la ITV en la capital, amanecieron abarrotados debido a que los conductores recién en estos días decidieron iniciar el proceso de actualización de la habilitación vehicular. En Asunción constituye un requisito previo que el rodado pase la inspección técnica.
Diego Cabral, gerente general, lamentó que una vez más la gran afluencia se registre recién en fecha próxima al vencimiento de la habilitación. En la mayoría de los municipios, el documento fenece el 30 de junio. “Lastimosamente, como todos los años, recibimos gran cantidad (de automovilistas) solo a última hora”, expresó. Al graficar la costumbre de la ciudadanía de dejar todo hasta último momento, el representante de Ivesur mencionó que días anteriores la afluencia de conductores llegaba a apenas 20 por día.
En la fecha, la cola se extendió por varias cuadras en torno a los talleres. “Estos son los últimos días, entonces la gente se aglomera en forma masiva”, manifestó. Con respecto a la atención, indicó que los talleres están abiertos de 07:00 a 19:00. “Igual siendo las 20:00 vamos a estar atendiendo hasta el último que esté en la fila”, garantizó. Recordó que la inspección es obligatoria para los automovilistas de Asunción y Luque.
Además de las largas filas, los conductores se quejaron del pésimo estado de las calles por las que se debe transitar para llegar a los talleres de inspección técnica vehicular. En la víspera, un conductor denunció en el espacio Crónicas Ciudadanas las terribles condiciones de las arterias. En la fecha, la situación empeoró debido a las precipitaciones, que terminaron inundando aún más las vías en los alrededores. Los automovilistas se vieron obligados a atravesar verdaderos ríos e incluso aguardar en fila en medio del agua.
Las quejas y roces entre los mismos conductores en las filas para realizar la ITV no se hicieron esperar. Varios reclamaron la lentitud del proceso. La incomodidad se intensificó cuando durante las primeras horas se registró un corte de energía, que paralizó las actividades por un momento.
Cabral mencionó que no previeron un generador de energía para esos casos, debido a que las interrupciones en la provisión de energía no son frecuentes. “Lastimosamente se debe esperar a que vuelva la energía; para mover esta planta necesitamos un generador bastante grande y eso no es rentable económicamente porque los cortes no son con frecuencia”, sostuvo. Por otra parte, la espera en medio de raudales y calles destrozadas ocasionó que los ánimos se exacerbaran, por lo que se generaron algunas discusiones entre los mismos automovilistas, de acuerdo a denuncias acercadas a esta redacción.