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“La discriminación genera muerte, violencia y odio, impidiendo el pleno goce de todos los derechos para todas las personas”, expresó Jorge Benítez, Coordinador del equipo “Somos Iguales” de Amnistía Internacional Paraguay.
El sábado arrancó la campaña impulsada por la organización que se denomina “La muerte nos trata a todos por igual, la vida también Debería hacerlo. Unite a la lucha contra la discriminación. Denuncia”.
El objetivo de la campaña es de concienciar sobre la problemática de la discriminación, “para instalar un debate en la sociedad acerca de las consecuencias terribles, mediante la capacidad de visibilizar los diferentes tipos de discriminaciones comunes en la sociedad paraguaya”.
La inicitiva también busca incentivar a la ciudadanía a realizar denuncias de discriminación a través del Centro de Denuncias de la Red de Organizaciones No Gubernamentales (ONGs).
Activistas de Amnistía Internacional salieron a las calles a repartir adhesivos para automóviles con el mensaje “Digo no a la discriminación” acompañado de materiales informativos y de concienciación sobre la problemática.
En Paraguay, los grupos más afectados incluyen los pueblos indígenas, mujeres, personas con discapacidad, personas con VIH y las personas con diversidad sexual (lesbianas, gays, stransgénero, bisexual e intersex).
La discriminación significa “toda distinción, exclusión, restricción o preferencia que se establezca por motivos de raza, color, linaje, origen nacional, origen étnico, idioma, religión, opiniones políticas o de cualquier otra índole”.
La Constitución Nacional establece que “todos los habitantes de la republica son iguales en dignidad y derechos. No se admiten discriminaciones” en su artículo 46. La obligación de dar cumplimiento a la ley es el Estado.