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Durante la siesta y la tarde del martes corrieron versiones sobre la salida de Ludovicco Sarubbi de la Essap, ya en horas de la noche esta versión fue efectivamente confirmada por el propio funcionario a través de su perfil en Facebook. En el mismo mencionó que su renuncia era por cuestiones personales, pero que seguirá trabajando tanto por el agua como por el saneamiento donde le toque ejercer funciones.
De acuerdo a fuentes debidamente identificadas, la salida de Sarubbi está ligada a la exigencia del Banco Mundial al Ministerio de Hacienda de que tome cartas en el asunto, luego que el organismo internacional detectó indicios de irregularidades en el convenio firmado entre la Essap con el consorcio Bella Vista para el relleno hidráulico en el Bañado Norte.
Según los documentos, el Banco Mundial proyectó desembolsar un total de G 54.908.773.103 según el acuerdo que data de setiembre de 2015. En el mismo se advierte además que en caso de que el contratista incurra en prácticas corruptas, el contratante está facultado “a rescindir el contrato y expulsar al contratista del sitio de obras”.
Un memorándum emitido por el Banco Mundial a mediados de agosto de 2017 refiere que el consorcio Bella Vista presentó información de contenido falso a efectos de quedarse con la licitación, motivo suficiente para la rescisión, si se tiene en cuenta las clausulas del convenio anteriormente mencionado. También se comprobó que el consorcio subcontrató a otra empresa para ejecutar las obras.
El Banco Mundial inició su investigación tras desembolsar la mitad del dinero, mientras que los órganos estatales reaccionaron de forma tardía, a pesar de las graves consecuencias del incumplimiento de los términos establecidos en un convenio.
A finales de agosto desde el Consejo de Instituciones Públicas, integrado por el Ministerio de Hacienda, Procuraduría entre otros entes estatales, anunciaron “novedades” en torno a la denuncia del Banco Mundial.
Por su parte Sarubbi se llamó a silencio luego de que el caso tomó estado público, alegando términos de confidencialidad de los documentos. Ya al inicio de setiembre el mismo anuncia su renuncia al cargo de presidente del Consejo de la Essap.
El proyecto en cuestión contemplaba además la construcción de unas 96 viviendas para los pobladores del bañado que serían afectados por las obras de relleno sanitario, que tampoco se cumplió en su totalidad, por parte del consorcio integrado por las empresas Magtel y ERS.