Incidentadas últimas horas

PARAGUARÍ. Un ambiente caldeado se vivió en la planta verificadora local, donde debieron intervenir cascos azules para evitar que se desborde la situación entre los más de 1.000 automovilistas y motociclistas que acuden a dos días del fin de la tregua.

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La discusión se inició debido a que algunos motociclistas y automovilistas querían avivarse e ingresar sin haber formado la fila. Esto motivó una airada discusión, con algunos empujones, pero la situación no pasó a mayores. Ante la denuncia de que podría ocurrir algún incidente grave en el lugar dieron aviso a la comisaría de Ñuatí. Incluso se llegó a convocar a los cascos azules para resguardar el lugar y montar guardia tras la crisis generada.

El comisario Ovidio Benegas al llegar ubicó a un costado a los cascos azules y luego ordenó el ingreso de dos automóviles y cuatro motocicletas. Sin embargo, el jefe policial dijo que el sistema que utilizan es muy lento, que se debió prever más personal tanto para la atención al cliente como también más encargados de la verificación.

Robert Bobadilla, uno de los motociclistas, dijo que si desde primera hora se pedía el apoyo de la Policía para ordenar la forma de ingreso, ya se hubiera avanzado. Agradecieron la presencia del comisario y de los efectivos policiales para garantizar que no ocurran incidentes.

Los contribuyentes se quejaron primero porque deben esperar mucho para el pago de las tazas y luego deben salir a pelear para recuperar sus filas. Las autoridades responsables del Registro Único del Automotor (RUA) deben buscar alguna alternativa de solución, habilitando más cajas, incorporando más personales y mejorando el lerdo sistema informático que utilizan, indicó.

Dijo que en nuestro país se exige, se cobra en forma compulsiva, pero tampoco las autoridades brindan un servicio acorde a la realidad y el contribuyente es maltratado por exigir un buen servicio.

La tensión entre los conductores se intensifica debido a que tienen conocimiento que desde el 2 de enero todos los vehículos que circulen en Paraguay deberán contar con chapa definitiva y no provisoria, de lo contrario los vehículos serán retenidos hasta que sus propietarios regularicen su situación. A esta preocupación se suma que al parecer esta verificadora ya no trabajará desde el próximo 31 de diciembre, manifestó el verificador Darío León.

El funcionario de la verificadora de Paraguarí manifestó que “la gente se deja estar y deja todo para última hora y que desde hace ocho días que vienen masivamente. Se hace lo que se puede ya en estas instancias finales”.

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