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Tal y como lo había anunciado más temprano, el fiscal Julio Ortiz informó que ya imputó a Azucena Cabrera, decana de Veterinaria de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), bajo la figura de comercialización de alimentos nocivos en el caso de brote de brucelosis en la casa de estudios. Dos casos fueron confirmados hasta el momento que tuvieron origen en el lugar.
El agente del Ministerio Público anunció que mañana presentará el documento ante el juez Gustavo Bóveda de San Lorenzo.
En su declaración testimonial, la profesional negó haber tenido intención de ocultar información sobre el brote de la enfermedad, que recién cobró notoriedad al confirmarse un caso en un alumna que contrajo la enfermedad. Ahora ya fue confirmado el segundo caso en otra estudiante.
Cabrera se negó a brindar declaraciones a la prensa, pero su abogado Elber Caballero manifestó que su cliente recién tuvo conocimiento de la sospecha de brucelosis el 6 de octubre y ordenó al jefe de División de Caprinos que tome las medidas conforme al manual de procedimiento. Negó que haya solicitado el encubrimiento del brote.
Oficialmente la decana y los miembros del consejo tuvieron conocimiento del hecho el 6 de octubre. La negligencia fue de los profesores Nelson Rubén Serafini y Alexander Szwako González por no seguir el manual de procedimiento.