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El ministro Aguilera valoró la campaña “que busca paliar el déficit en el equipamiento de nuestras instituciones educativas”. También agradeció a las empresas y particulares que en tan poco tiempo pudieron donar más de 1.500 sillas pedagógicas a varias instituciones.
“Los pupitres fueron elaborados con base en un estudio y a un análisis fino de lo que necesitan nuestros jóvenes. Estimamos que este mobiliario donado tendrá una larga vida institucional brindando comodidad a los estudiantes”, agregó el ministro.
Por su parte, el impulsor de la campaña, Marco Nicolás Bo, recordó que el proyecto se inició gracias a la apertura que recibieron por parte del Ministerio de Educación. “Esta campaña busca acompañar al sector público. Y nuestra meta para este año es la de dotar de 150.000 sillas pedagógicas a las instituciones que lo precisen con el apoyo de la ciudadanía y el sector privado”, dijo.
La silla pedagógica está elaborada en poliuretano de alta resistencia reciclable 100%, es ergonómica, muy segura y económica; su costo es de G. 150.000, y está fabricada por la firma nacional Envapar SA, y es ideal para lugares con altos niveles de sal en el suelo (como en el Chaco), donde los pupitres de metal se corroen fácilmente, además puede mojarse sin problemas.
“Un pupitre...” donó hoy a la escuela básica Nº 110 Capitán Bernardino Caballero, de Luque, 61 sillas pedagógicas.